miércoles, 22 de julio de 2020

Encuentro de camaradería de las Fuerzas Armadas

El Presidente reivindicó el rol de las FFAA durante la pandemia y anunció un reconocimiento salarial esperado, a partir del 1° de octubre, todos los suplementos no remunerativos pasarán a integrar el sueldo formal de los miembros de las fuerzas
Por Infobae


Alberto Fernández reivindicó especialmente el rol que tuvieron las FFAA durante la pandemia por coronavirus y anunció un reconocimiento salarial que era exigido por los miembros de las tres fuerzas, en el acto que incluyó varios gestos políticos del jefe de Estado hacia el sector.

El presidente de la Nación Alberto Fernández, el ministro de Defensa Agustín Rossi  y atrás de ellos los Jefes de Estado Mayor Conjunto y de las tres fuerzas antes de iniciar el "Encuentro de Camaradería de las Fuerzas Armadas" en el Edificio Libertador (Fuente: Infobae) 

Luego de homenajear a los caídos de Malvinas y del ARA San Juan, el Presidente hizo un repaso de las diversas tareas que se encomendaron a los miembros del ejército durante la cuarentena “Las cumplieron al pie de la letra y no saben cuánto ayudaron; esto que en la jerga militar se conoce como operaciones subsidarias, fueron primordiales para que la Argentina siga trabajando y fundamentalmente para preservar la salud y la vida de los argentinos”, planteó.
En la tradicional cena de camaradería, que este año no tuvo nada de cena porque se realizó a las 11:30 en virtud del aislamiento social y obligatorio vigente, celebró especialmente que los camiones militares hayan sido recibidos y despedidos con aplausos en varios barrios humildes de la Argentina. “¡Gracias! No estuvieron ausentes cuando la Argentina los necesitó”, aseguró.El jefe de Estado salió especialmente de la Quinta de Olivos donde cumple con una cuarentena estricta, para tomarse una foto con los cuatro referentes de las FFAA: el jefe del Estado Mayor Conjunto GB Juan Martín Paleo, del Estado Mayor de la Fuerza Aérea Brigadier Xavier Isaac, del Ejército GB Agustín Cejas y el de la Armada Argentina contraalmirante Julio Guardia.Además, el mandatario anunció que todos los suplementos no remunerativos comenzarán a formar parte del salario formal de los miembros de la fuerza “Lo que estamos haciendo es ordenar lo que se desordenó y ponerle fin a todas las desigualdades que se produjeron durante este tiempo todos hemos visto”, afirmó.



Otro aspecto del Encuentro de Camaradería de las Fuerzas Armadas (Fuente: Infobae)
Un acto con un contexto políticoAunque se trata de un acto en el que anualmente participa cada Presidente, todavía resuenan los cuestionamientos públicos que Nora Cortiñas pronunció en febrero pasado, luego de que Alberto Fernández llamara a “dar vuelta la página" en la relación con las FFAA: la referente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora lo llamó “negacionista” pidió una recificación pública y sostuvo que “no hay posibilidad de reconciliación con los genocidas”.Ese cruce, uno de los primeros cimbronazos internos que sufrió el jefe de Estado cuando llevaba poco más de dos meses en el poder, se produjo días después de que Fernández participara en la despedida de un contingente de Cascos Azules, evento en el que estuvo acompañado por las cúpulas castrenses.

El temblor puertas adentro de la coalición gobernante fue significativo y provocó que el mandatario se disculpara públicamente, “dije que podíamos “dar vuelta la página” porque entre nuestros oficiales ya no quedan partícipes activos o complacientes del terrorismo de Estado. He visto que mis palabras han herido la sensibilidad de las víctimas de la dictadura. Nunca quise causar en ellas el más mínimo dolor. Veo que no usé las palabras pertinentes. Disculpas por ello. Que nadie crea que niego el horror vivido. Como siempre debemos estar unidos para que el ‘nunca más’ que pregonamos sea ‘nunca más’ en la Argentina”, se descargó en una larga serie de tuits.

Hace exactamente una semana, tras la revolución que provocaron los cuestionamientos de Hebe de Bonafini, la misma referente de Derechos Humanos (Cortiñas) advirtió que el Presidente “tiene libertad de manejarse y decidir con qué personas se reúne”, pero advirtió que “el límite son los genocidas. Si se sienta en la mesa con ellos, seguramente haremos alguna advertencia. Me duele cuando elogia de más a las Fuerzas Armadas”

sábado, 11 de julio de 2020

La defensa de la Nación y sus capacidades estratégicas

El deterioro gradual y profundo de las capacidades de las fuerzas de defensa afecta las posibilidades de cumplir con sus misiones: principales y secundarias. Las áreas de infraestructura, equipamiento, tecnología, logística y personal están particularmente afectadas. Muchos años serán necesarios para revertir este proceso.
Por GD (R) Gustavo Jorge Luis Motta - Infobae

La dinámica posterior a la Guerra de Malvinas estuvo iluminada por una marcada desconfianza hacia las FFAA, la sanción unánime de las leyes del consenso democrático permitió un avance sustancial e imprescindible en materia de DN; sin embargo, no hubo un correlato en la regeneración de capacidades militares aun cuando hubo anuncios y otras previsiones de re-equipamiento, como la expresada en la Ley de Reestructuración de las Fuerzas Armadas, que no se materializó.
Los resultados están a la vista: los costos a pagar serán ahora muchísimo más elevados que si se hubiesen generado mecanismos de renovación mínimos en aquella oportunidad; abarcan cuestiones tan variadas como las relacionadas con la logística, la ruptura de la cadena de conocimiento, la pérdida de valiosa experiencia, el retroceso en I&D, la reducción en el adiestramiento de tripulaciones, el envejecimiento de material, la emigración de especialistas hacia otras profesiones, el deterioro de la infraestructura crítica, por nombrar sólo algunas.

Es necesario profundizar la renovación de las capacidades estratégicas de las fuerzas militares en el cumplimiento de su rol principal de DN, ellas y un amplio despliegue nacional permiten llegar adonde nadie llega, cumplir con sus tareas específicas en forma sostenida y en todo tiempo, también tender una mano al más necesitado y no hay otras instituciones que las puedan reemplazar. El instrumento militar de la defensa no sólo se nutre de medios materiales, también requiere de un capital humano muy calificado que constituye una capacidad estratégica; su preparación lleva muchos años, la vocación de servicio y la formación en valores sanmartinianos se manifiestan día a día cuando los jóvenes militares realizan sus tareas, las campañas antárticas, las misiones de paz, el despliegue de apoyo en el Norte y la ayuda ante emergencias y desastres naturales han sido y son testimonio de su entrega

El área de recursos humanos se compone, en general, de un liderazgo de alta calidad humana y profesional, de una formación y capacitación de excelencia, siempre acompañada de una eficiente gestión del talento y, de beneficios y compensaciones adecuados, con alcance a todos los integrantes de las FFAA. La defensa compite en el mercado laboral con otras del quehacer nacional, atraer y mantener jóvenes, con genuina vocación profesional a sus filas, no es ni será una tarea sencilla para los responsables de la toma de decisiones.La regeneración de capacidades estratégicas para cumplir con las misiones fijadas en las normas vigentes abarca un amplio espectro y no tiene efectos inmediatos ¡si somos optimistas! lo que se programa hoy, puede tardar dos, tres o más ciclos de gobierno para su concreción, la tecnología es omnipresente, por esta razón, se deben adquirir equipos y sistemas hoy, pero también abonar la investigación, desarrollo y producción con vistas al 2035.

El mundo cambia y no podemos mantenernos ajenos a ello, en la era de la globalización, las crisis y conflictos son imprevisibles y multidimensionales, su complejidad puede afectar nuestra integridad y soberanía y la de países socios, amigos y aliados, la cooperación y competencia de los Estados se manifiesta en todos los ámbitos, las grandes potencias dirimen su primacía. También la era de la información nos enfrenta a nuevas formas de conflictos: redes, nodos, hackers, ciber ataques, virus informáticos, protección de información crítica, etcétera, desnudan vulnerabilidades y nos refieren a la ciberdefensa. 
Nuestro país está fraccionado geopolíticamente; posee contrastes importantes en el desarrollo e integración de provincias y regiones, nuestra variada geografía presenta innumerables recursos naturales estratégicos, los espacios terrestres, marítimos y aéreos requieren de un control permanente ante una creciente depredación y permeabilidad de las fronteras. El Atlántico Sur y la Antártida presentan desafíos y riesgos singulares para la DN, el cambio climático y el deterioro medioambiental afectan en forma creciente la producción de alimentos y el agua dulce se convierte en un activo escaso.

Al ser la defensa integral, es importante entonces motivar y generar un sólido pensamiento estratégico y geopolítico, a partir de un criticismo constructivo sin rigideces y con amplia participación, la falta de una actitud abierta y franca anula la razón práctica para encontrar soluciones duraderas a los problemas del futuro. La DN es un activo de todos los argentinos, someterla a una situación de mera supervivencia la condenaría al fracaso ante cualquier contingencia o escenario conflictivo, ningún Estado en el mundo puede prescindir de una herramienta como sus FFAA, porque ellas son instituciones sólidas, confiables y efectivas, subordinadas y respetuosas de las leyes de la República y derechos de las personas. Razonadas y consensuadas políticas de defensa necesitan ser acompañadas de un fondo nacional permanente y plurianual como el que fue presentado al Poder Legislativo a fines del año pasado, la concientización de la sociedad sobre este tema es también un atributo importante para revertir la situación.

Las actuales circunstancias de la Argentina hacen parecer poco oportuno hablar de DN y de capacidades estratégicas a lograr con su instrumento militar, porque las urgencias nos devoran la agenda, sin embargo, cuando un tema es importante o el problema es significativo, la gestión demanda lo mejor de la estrategia y la estrategia lo mejor de la política de Estado, retomar la necesidad de un plan de desarrollo estratégico, que aúne consensos e integre fuerzas, incluyendo a la DN, es cada día más evidente, para atender escenarios competitivos y cooperativos que de por sí, son muy inciertos y complejos.

¡Indispensable y urgente! “formar en estrategia y geopolítica para la defensa nacional”

Tucídides, avezado estratega del siglo V aC y autor del clásico Historia de la Guerra del Peloponeso, donde narra los acontecimientos con un fin didáctico y programático, sentencia: "Cuando los hombres entran en guerra, comienzan por la acción, lo que debería ser su último recurso, pero cuando se encuentran con la desgracia, entonces ya recurren a las palabras".
Por Juan José Borrell – Infobae

El reciente anuncio desde la cartera de Defensa de elaboración de un proyecto de ley para la creación de un contingente de reservistas civiles viene a sumarse al abanico de discursos e insípidas promesas que tienen como marco la nueva Directiva de Política de Defensa Nacional (DPDN) aprobada por Decreto 703/2018 del PEN. La misma DPDN discursivamente es un avance respecto a los decretos derogados de 2009 y 2014 de la nefasta administración anterior en materia de Defensa. Sin embargo el evidente voluntarismo que trasunta el documento, a caballo del proceso en marcha de "reconversión de las Fuerzas Armadas", apenas disimulan el alarmante continuismo de todas las gestiones de gobierno; la sumatoria de palabras vacuas parece confirmar (amargamente claro) la imperecedera enseñanza del genial jefe militar griego ¿seremos entonces un pueblo en desgracia?

Un riguroso análisis excedería ampliamente el espacio de estas líneas, pero lo que innegablemente sale ya a la luz quitando el maquillaje retórico es el insustancial híbrido que ha devenido la cuestión Defensa argentina: las austeras medidas buscan remendar más que regenerar, reciclar forzadamente retazos bajo discursos de buenismo internacionalista y una mentalidad en extremo frugal para lo que implica las condiciones óptimas para la Defensa de un país que tiene la octava superficie territorial del planeta. El fundamento pivote, la mentada "modernización", es un cosmético salto hacia adelante que toma algunos elementos del paradigma de la denominada Guerra de Cuarta Generación (omitiendo otros que serían más realistas) cuando en verdad al sistema de Defensa se lo restringió a desmantelar una eficiente y productiva infraestructura propia de Segunda Generación, y que desarrollos o adquisiciones de Tercera Generación se desactiven o queden obsoletos sin renovarse.

Del modelo soberano de industria nacional pasamos a la pudorosa compra al menudeo de material de segunda mano sin capacidad disuasiva. No es nuevo que nos sintamos posmodernos sin haber pasado por todos los escalones de la modernidad. Al fin y al cabo, Argentina ¿no es el país donde se concebía que "es lo mismo producir caramelos que acero"?, según afirmaba un secretario de Comercio de la Nación.Poder asumirlo sería la clave inicial para una regeneración de la DN ¿Cuál es el necesario paso siguiente? La respuesta es de carácter epistemológico-educativo: la producción original de conocimiento y la formación en áreas neurálgicas como la estrategia y la geopolítica, esta última entendida como la interacción compleja entre las configuraciones geográfico-espaciales y los procesos que comprenden factores de poder, la cual es tributaria de la estrategia, definida como la planificación para la prosecución de los intereses vitales de un país, la que a su vez es determinada en el más alto nivel de la política de un Estado.

Es decir, en una secuencia lógica la alta política define el qué, la estrategia el cómo y la geopolítica el dónde y con quiénes: son en síntesis las dimensiones trascendentales que sirven de trasfondo para la dirección de los asuntos de gobierno, sea la política exterior, los acuerdos diplomáticos y de comercio internacional, la política económica, la doctrina y equipamiento militar, la infraestructura de transporte y de comunicación interna, la producción científico-tecnológica, el sistema educativo e industrias culturales, todas las políticas domésticas y hasta la ayuda humanitaria. Sin una estrategia y una geopolítica propia cualquier actividad de un país queda aislada y huérfana, se transforma en un mero fin en sí mismo, un juego de ciegos y sordos carente de coherencia y orientación; son en esencia las que sirven para definir qué país queremos y hacia dónde vamos; pero, lo complejo en la Argentina es precisamente su puesta en práctica.Existen sólidos institutos de alta formación en DN y en estrategia y geopolítica, pero quienes en las últimas décadas han debido planificar, legislar, supervisar, asesorar y/o ejecutar en el nivel superior de la República, han carecido de la formación para la comprensión profunda de estas dimensiones vitales. Así, en el ámbito de la defensa como en otros, el inmediatismo de cada coyuntura es disfrazado con una vacía verborragia que oficia de simulacro. El cortoplacismo atado al reloj de las promesas de campaña electoral de por sí anula la capacidad de comprender el carácter crisógeno de tendencias geopolíticas pesadas y proyectar en el largo plazo; para lo cual también, cierta torre de marfil académica de nativos arropados de cosmopolitismo a la moda resulta funcional impostando enfoques ajenos, justas causas exóticas y amenazas sin raíz local. No es casual que el último referente de un pensamiento geoestratégico original (y no meramente geográfico o internacionalista) sea el Grl Juan Enrique Guglialmelli con sus trabajos desde el año 1969 hasta su deceso en 1983.

A la inversa, toda potencia de primer y segundo orden que comprende la función central de la estrategia y la geopolítica, ejecuta sus propias políticas de defensa, tiene la capacidad de definir su propia doctrina en relación con sus intereses vitales según un orden de prioridades, demarca los espacios posibles de proyección de poder, identifica sus propias amenazas y riesgos, y también dispone los medios para afrontarlas. Lo que es más, algunas potencias logran incluso exportar sus cosmovisiones a países periféricos y débiles para que las adopten como suyas, así funcionalmente invisibilizan amenazas reales y atribuyen entidad a falsos monstruos a conjurar.

De aquí que, por ejemplo, los nativos de un país con la octava superficie a nivel mundial que ha quedado casi sin Fuerza Aérea pueden creer que uno de sus dilemas prioritarios es el cambio climático. Tampoco tienen capacidad de control y dominio de la casi totalidad de su espacio marítimo, una extensión de aproximadamente 1.800.000 km² y más de 5.000 km de frontera con enormes reservas de hidrocarburos y recursos ictícolas codiciados por grandes potencias extra regionales (donde vale recordar desapareció un submarino de la Armada), pero desde el nivel gubernamental aseguran que los conflictos convencionales son cosa del pasado. Vaticinan erróneamente que el futuro será exclusivamente de las guerras asimétricas, que una mal entendida "tropa ligera" es la proporción justa para 2.800.000 km² con intención de proyección al continente antártico y al Atlántico sur circundante. Elevan los riesgos procedentes del ciberespacio al mismo nivel de jerarquía que los de naturaleza clásica, pero no señalan amenazas latentes concretas y evidentes como las de tipo biológico o las inmigraciones masivas procedentes de otros continentes.Todo ello quizás sea un reflejo sintomático de una sociedad sin conciencia del espacio que elige sus representantes; si al fin y al cabo la mitad de la población argentina vive amuchada en su región ecuménica con epicentro en una megalópolis y cuatro grandes urbes, y su mayor dilema de seguridad es no ser arrastrada bajo la línea de la pobreza además de la criminalidad rampante ¿cuál es el sentido geoestratégico que adquiere un territorio semivacío de 1.000.000 km² como la península Patagónica? ¿Cuál es el dilema si la superpotencia china instaló una base espacial militar a cambio de seguir comprando porotos de soja, despojos de pollo y maní?

En definitiva, se debería reconocer la vital importancia de la DN, otorgándole un significativo incremento del presupuesto, pero particularmente dándole gravitación y sentido desde un pensamiento estratégico y geopolítico propio. Al menos de esa manera las palabras dichas no serían vanas sino que con un fin trascendente para el país, y comenzaríamos a revertir la trágica sentencia de Tucídides.

El ministro de Defensa Agustín Rossi frena la compra de armas y vehículos militares a los EEUU por US$100 millones

Agustín Rossi, congeló la posible compra de vehículos militares, armas y otros equipos a EEUU por un monto de US$100 millones, pese a que el gobierno de Donald Trump autorizó en las últimas horas la gestión que se había iniciado durante el mandato de Mauricio Macri.
Por Mariano de Vedia – La Nación

La operación comprende la compra de 27 vehículos de transporte de infantería Stryker, ametralladoras y equipos de intercomunicación, que iban a ser destinados a tareas de apoyo en casos de desastres y catástrofes naturales y el mantenimiento de la paz, de acuerdo con obligaciones internacionales asumidas por el país. "Fue un pedido de la gestión anterior. Nosotros tenemos que evaluar el financiamiento, el equipamiento que se compraría, si sirve para las prioridades de esta gestión. La compra está en análisis y la operación está bastante verde", dijo a La Nación una fuente oficial

La posible compra de vehículos pesados para el Ejército estaba contemplada en el proyecto del presupuesto 2020, que nunca llegó a tratarse en el Congreso. La operación había sido impulsada por la gestión de Oscar Aguad en el Ministerio de Defensa, que al mismo tiempo avanzó con EEUU en negociaciones para adquirir 4 aviones P3 usados, que iban a ser destinados a la ARA para el control de la pesca ilegal en el Atlántico Sur. Esas gestiones no se retomaron tras la asunción del presidente Alberto Fernández

La autorización del gobierno norteamericano, dispuesta en los últimos días por el Departamento de Estado, constituía un paso vital para la venta a la Argentina de 27 vehículos Stryker M1126, 27 ametralladoras M2 Flex y otros equipos militares así lo notificó la Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa al Congreso, aunque el gobierno argentino no cuenta esta operación entre sus prioridades. La misión de dicha agencia es promover "los intereses de seguridad nacional y política exterior de los Estados Unidos, mediante el desarrollo de la capacidad de las fuerzas de seguridad extranjeras para responder a desafíos compartidos"Al dar el visto bueno a la compraventa, la administración de Trump evaluó que la propuesta respaldaba las metas de política exterior y los objetivos de seguridad nacional de ese país, al "mejorar la seguridad de un importante aliado no perteneciente a la OTAN y un socio estratégico en América del Sur", según un comunicado de la citada agencia. El organismo informó al Congreso que la eventual operación "no alterará el equilibrio militar básico en la región" y se especificó, además, que el contratista principal para la concreción de la propuesta será la empresa General Dynamics Land Systems, Anniston, AL.

"La compra de los vehículos militares era complementaria a la de los cuatro aviones P3, que podían haber sido comprados por unos $160 millones, al cambio de hoy", evaluó una fuente cercana a la anterior gestión que encabezó Aguad. Esa operación hubiera servido especialmente a la Argentina, ya que después de la desaparición del submarino ARA San Juan, el país no tiene aviones ni barcos en condiciones para un efectivo control de la pesca ilegal en el Atlántico Sur.

Regreso al decreto 727/06, reglamentario de la Ley de Defensa Nº 23.554/88: “La ideología que atenta contra la defensa nacional”

Las ideologías pueden desarrollarse gradualmente o bien ser impuestas por un grupo dominante especialmente interesado en generar influencia o control colectivo, sin distinción de si su propósito se centra en promover el bien común o un interés particular
Por Jorge García Mantel – La Prensa

Desde hace dos décadas, el vapuleado sistema de DN se encuentra controlado por intereses políticos ideológicos anacrónicos, que buscan mantener a las FFAA reducidas a su mínima expresión y cumpliendo la menor cantidad de roles posibles, vía un ahogo presupuestario interminable, colocando así peligrosamente al país no sólo en un virtual estado de indefensión, sino también evitando que el brazo armado de la política exterior y una herramienta clave de cualquier estado moderno, pueda servir más y mejor a preservar los intereses nacionales.
En este sentido, recientemente se volvió a poner en vigencia el decreto 727/06, reglamentario de la Ley de Defensa Nº 23.554/88, que había sido derogado, en parte, por el gobierno anterior.
En primer lugar, cabe recordar que la Ley 23.554 expresa en su artículo 2°: "La Defensa Nacional es la integración y la acción coordinada de todas las fuerzas de la Nación para la solución de aquellos conflictos que requieran el empleo de las Fuerzas Armadas, en forma disuasiva o efectiva, para enfrentar las agresiones de origen externo. Tiene por finalidad garantizar de modo permanente la soberanía e independencia de la Nación Argentina, su integridad territorial y capacidad de autodeterminación; proteger la vida y la libertad de sus habitantes''

El decreto 727/06, en su artículo sumó a lo expresado en la ley, que "se entenderá como agresión de origen externo el uso de la Fuerza Armada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de nuestro país, o en cualquier otra forma que sea incompatible con la Carta de las Naciones Unidas''. De esta manera y, en un claro exceso reglamentario, se decidió restringir las potencialidades de las FFAA ante una agresión de origen externo, que fue el mandato y el espíritu de lo establecido en la ley de defensa de 1988 votada por unanimidad.

Esta innecesaria e ideológica restricción, no considera que hoy, y más aún lo será en el futuro, las agresiones no sólo son de carácter estatal militar (otra fuerza armada) sino que en innumerables ocasiones se manifiestan de otras formas que, sin dejar de tener su origen en el exterior, se desarrollan en nuestro territorio y/o tienen efectos en él, afectando intereses que la DN puede y debe contribuir a preservar. 
Otras formas, que incluso son detalladas en la Resolución 3314 de la Asamblea General de las Naciones Unidas del año 1974 que define agresión, y que, paradójicamente, es mencionada entre los fundamentos del nuevo decreto 571/20 que reinstala el 727/06. En este sentido, parece haberse omitido que en el artículo 3º inciso g), la citada Resolución, expresa que también “...se caracterizará como un acto de agresión, al envío por un Estado, o en su nombre, de bandas armadas, grupos irregulares o mercenarios” y que en el artículo se expresa, además, que “la enumeración de los actos mencionados anteriormente (refiere a todo el artículo 3º) no es exhaustiva...”

De esta manera, ni la Ley de DN, ni la propia ONU, definen el concepto de agresión externa, en los términos restrictivos que lo hace el decreto 727/06, tampoco ningún país del mundo limita como la Argentina, el accionar de sus FFAA ante una agresión externa. En este sentido, podemos agregar a las agresiones expresadas en el artículo 3.g) de la Resolución de las Naciones Unidas antes mencionada, entre otros, los ciberataques que se pueden lanzar desde cualquier país del orbe y los ataques terroristas dirigidos desde el exterior, dos de los cuales afectaron a nuestro país en la pasada década del 90. De acuerdo con el decreto 727/06, entonces, nuestras FFAA no podrían actuar en todos estos casos, por no tratarse de una ¡invasión de FFAA de otro país!

En segundo lugar, debe resaltarse lo señalado en el artículo del decreto 727/06 reinstalado que expresa: "El Sistema de Defensa Nacional no podrá contemplar en su formulación doctrinaria, en la planificación y adiestramiento, en la previsión de equipos y/o medios, supuestos y/o situaciones pertenecientes al ámbito de la seguridad interior, conforme la misma aparece delimitada en la Ley Nº 24.059 de Seguridad Interior''

Peligroso
En este sentido, resulta un tanto contradictorio y hasta peligroso que, recientemente se haya reforzado la presencia de elementos de combate de infantería de las FFAA para proteger la frontera norte junto a las FFSS, sin que puedan planificar, ni adiestrarse, ni equiparse para un rol diferente al esencial. Lo mismo podría decirse del empleo de helicópteros de las FFAA en el AMBA para hacer patrullajes aéreos en apoyo de controles vinculados al Covid-19

Por otra parte, debería analizarse la legalidad de estos empleos, no sólo por la particular definición de agresión externa del decreto 727/06 ya descripta, sino especialmente por la Ley de Seguridad Interior, ya que ésta sólo contempla la participación de elementos de combate de las FFAA para reestablecer la normal situación de seguridad interior, previa declaración del estado de sitio (Art 32º) o para repeler un ataque a una jurisdicción militar (Art 28º); sólo autoriza esta ley "..que las FFAA apoyen las operaciones de seguridad interior mediante la afectación a solicitud del Comité de Crisis, de sus servicios de arsenales, intendencia, sanidad, veterinaria, construcciones y transporte, así como de elementos de ingenieros y de comunicaciones...'' (art 27º). En suma, los elementos de combate de infantería y los helicópteros de exploración desplegados, no se encuadran dentro del articulado antes mencionado ni de las categorías enumeradas en el Art 27º de la Ley de Seguridad Interior, las que se engloban genéricamente como elementos de apoyo logístico

Estado crítico
En conclusión, sería deseable abordar la temática de la DN dejando de lado prejuicios ideológicos, que ya nadie mantiene ni en el mundo ni en la región. Hoy las amenazas a los intereses nacionales trascienden fronteras y ningún Estado del orbe está en condiciones de autolimitarse por ninguna razón y menos por ideología. Limitaciones que, por la fuerza de los hechos/necesidades (como hemos analizado), se terminan vulnerando. Las FFAA deben poder ser empleadas en forma disuasiva o efectiva para enfrentar las agresiones de origen externo, así como pueden y deben colaborar con las FFSS dentro del marco de las leyes de defensa y de seguridad interior vigentes, sin sobreactuaciones jurídicas. No escapa a nadie que las FFAA se encuentran en un estado crítico y no disuaden a nadie desde hace muchos años, lo que puso a este enorme y rico país ante la imposibilidad de hacer frente a las amenazas presentes y futuras.

Esto fue descripto con gran detalle por el fiscal Di Lello en su informe “El Problema de la Defensa Nacional del 11 de septiembre de 2018”, motivado por la tragedia de ARA San Juan. Sería deseable que, en esta materia, se empezara a privilegiar el bien común de los argentinos con una política de Estado que permita disponer, lo antes posible, de un moderno y eficiente sistema de defensa, bien equipado y adiestrado, que además de cumplir con su misión principal de “Proveer a la Defensa Común como indica el Preámbulo Constitucional, pueda contribuir con el Estado, en cantidad y calidad de efectivos y de medios, con sus otros roles legales, en beneficio del interés nacional y del bienestar de sus habitantes, como lo hacen la casi totalidad de la Fuerzas Armadas del mundo”

Regreso al decreto 727/06, reglamentario de la Ley de Defensa Nº 23.554/88: “las FFAA sólo intervendrán si nos agrede otro Ejército”

Era un paso de riesgo calculado! derogar un decreto del gobierno macrista que ponía a las FFAA ante la posibilidad, aunque lejana, de realizar tareas de seguridad interior combatiendo el narcotráfico sería bien recibido entre los jefes militares
Por Luis Insaurralde – La Prensa

¿Por qué? Porque la conducción militar siempre consideró que involucrarse en esa tarea conlleva el riesgo de sufrir casos de corrupción en sus filas tal como ha ocurrido en otros países. No sería descabellado afirmar que el ministro Agustín Rossi conocía ese pensamiento militar desde su anterior paso por el Ministerio de Defensa entre mayo de 2013 y diciembre 2015; pero hay una cuestión principal a la que Rossi le puso el ojo, el decreto derogado Nº 683/18 hablaba de "agresiones de origen externo''. Rossi estimó que había allí una ambigüedad que podría llevar a considerar al narcotráfico como una agresión externa y habilitar a las FFAA a intervenir en cuestiones de seguridad interior. El nuevo decreto Nº 571/20, restableció la vigencia del decreto 727/06, que se refería a "agresiones de origen externo perpetradas por Fuerzas Armadas pertenecientes a otros Estados''

La reacción de la oposición no se hizo esperar ya que legisladores macristas dijeron que "esto nos retrasa a una normativa de hace 15 años" y deslizaron que nos acerca al modelo de Venezuela. Rossi lo rechazó de plano; aceptó que Venezuela utiliza a sus militares en cuestiones de seguridad interior, pero señaló que con estas modificaciones estamos más cerca del criterio norteamericano, Rossi no desconoce que EEUU es el principal proveedor de las FFAA argentinas (Ver: "El ministro de Defensa Agustín Rossi frena la compra de armas y vehículos militares a los EEUU por US$100 millones")


De todos modos, en el ámbito militar esto no parece estar en el centro del debate, ven mucho más acuciante solucionar sus necesidades básicas para el adiestramiento como municiones y uniformes. También les preocupa el éxodo de su personal más calificado a la actividad privada debido a los bajos sueldos, un ejemplo: la primera mujer que volaba un gigantesco Hércules se fue a pilotear aviones de una compañía Low Cost, esto también lo conoce Rossi, pero la solución es mucho más compleja que derogar un decreto

viernes, 10 de julio de 2020

La justicia falló nuevamente sobre la inconstitucionalidad de que el personal retirado de las FFAA y FFSS paguen el impuesto a las ganancias

La sentencia fue dictada en el ámbito de la CABA
Por Tiempo Militar

Se trata de Expte Nº13504/2013 caratulado: "Donaire, Ricardo y otros c/ EN - Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal Argentina s/ Personal Militar y Civil de las FFAA y de Seguridad"
En estos fallos personal en situación de retiro de la PFA se presentaron ante la justicia solicitando la inconstitucionalidad de la Retención del Impuesto a las Ganancias. El juzgado les da la razón y condena a la Caja de la Policía Federal Argentina a abstenerse en practicar las retenciones en materia de ganancias sobre los haberes de Retiro

El otro punto interesante es que la Sentencia reconoce un plazo de prescripción de 5 años, esto significa que el Estado Nacional deberá restituir los montos retenidos inconstitucionalmente desde 5 años hacia atrás, desde el momento de interposición de la demanda.En otros fallos (tribunales de Río Cuarto, Córdoba, Esquel, etc...) la restitución era desde la fecha de interposición de la demanda.

Esto vuelve a ratificar el criterio de los Tribunales inferiores quienes siguen la doctrina de la Corte Suprema ("Garcia, Maria Isabel"), que fundamenta los reclamos.
Hoy, los Juzgados continúan con la feria judicial extraordinaria.

miércoles, 8 de julio de 2020

1816 - 9 de julio - 2020 "Feliz Día de la Patria"


Han transcurrido 204 años de la Declaración de la Independencia Nacional y todavía escuchamos decir que somos una nación joven que intenta constituirse a sí misma!

Lejos estamos de haber alcanzado la madurez necesaria para que todos los habitantes de nuestro país puedan vivir con dignidad y de alcanzar el modelo de nación que anhelamos, pero es fácil responsabilizar a otros de nuestro destino


Pensemos al menos por un momento que cada uno de nosotros somos responsables y protagonistas del presente y futuro del país, porque a la historia no la hacen solamente los próceres sino también las personas comunes, como cada uno de nosotros.


¡¡Estamos a tiempo!! de revisar nuestras actitudes cotidianas y ser verdaderamente libres, emulando la valentía de aquellos que decidieron cortar lazos con España para ser responsables de una historia independiente, podríamos asumir verdaderamente nuestro propio destino y construir un país solidario, más honesto, más responsable y justo.


¡Porque la Patria es algo más que un concepto abstracto, es algo que creamos día a día, entre todos!

¡¡VIVA LA PATRIA!!



“La patria, amigos, es un acto perpetuo

Nadie es la patria, pero todos debemos

Ser dignos del antiguo juramento
Que prestaron aquellos caballeros 
De ser, lo ignoraban, argentinos.

Somos el porvenir de esos varones,

La justificación de aquellos muertos. 
Nuestro deber es la gloriosa carga 
Que a nuestra sombra legan esas sombras
Que debemos salvar. 
Nadie es la patria, pero todos lo somos.
Arda en mi pecho y en el vuestro, incesante,
Ese límpido fuego misterioso"
(Estrofas de un poema de Jorge Luis Borges)

miércoles, 1 de julio de 2020

Reflexiones sobre la Defensa Nacional - La nueva política de defensa nacional del 21/08/2018

A continuación una publicación del año 2018 sobre el tema de referencia y de actualidad hoy por su derogación y vuelta atrás, al 2006.

Irma Argüello explicó que en el mundo de hoy, los riesgos externos que enfrentan los países poco tienen que ver con las típicas guerras convencionales entre Estados.
"La primera y obvia pregunta a formular, es si a doce años del decreto 727/06 (firmado por Néstor Kirchner y Nilda Garré), conviene o no a los intereses nacionales este cambio que - mediante el decreto 683, del presidente Mauricio Macri- se encara ahora (en 2018)".
Por Carlos Hartmann – La Prensa
Así lo expresó en la apertura del debate realizado en la Universidad del CEMA (Centro de Estudios Macroeconómicos de Argentina) y en relación con la nueva política de defensa nacional de Argentina, la experta en seguridad internacional Irma Argüello, quien a manera de una pregunta "menos obvia", inquirió a su vez si podrá el gobierno de Cambiemos, sostener estas innovaciones, y qué sucederá después del 2019.Siempre en el mismo contexto, Argüello (quien cumplió a su vez, tras las palabras de bienvenida pronunciadas por el profesor Alejandro Corbacho, las funciones de moderadora durante las distintas exposiciones) reflexionó acerca de cuáles serán las condiciones y pasos para que esta reforma se traduzca en una real política moderna y sustentable, con miras a plasmarse en forma ordenada, y sin quedarse en una mera expresión de deseos. Y en lo que respecta, bajo este nuevo esquema, al rol de las FFAA, la experta en seguridad internacional y directora de la Fundación NPS Global se preguntó: ¿Cómo se aprecian las interfases (conexión física y funcional) con las Fuerzas de Seguridad, y qué condiciones deben darse para un ejercicio adecuado de los nuevos roles?.

Por último, Argüello destacó (antes de dar paso a las exposiciones de Horacio Jaunarena, Rosendo Fraga y Ricardo López Murphy, quienes respondieron las preguntas de un calificado auditorio), la importancia de evaluar el impacto de estos cambios, tanto en la sociedad como en la política, teniendo en cuenta que ha habido voces que no se han hecho esperar para expresar su rotunda oposición a ellos.
Los méritos del Decreto 683/18 A su turno, el ex ministro Horacio Jaunarena, quien se desempeñó tres veces al frente de la cartera de Defensa, manifestó que uno de los méritos del reciente Decreto 683, que amplía las facultades de las FFAA a tareas de seguridad interior, y les permitirá colaborar en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, es haber colocado esa discusión en el seno de la sociedad. "A diferencia de los chilenos, los argentinos nunca se preocupan por los temas de Defensa", indicó Jaunarena (ex ministro durante las presidencias de Ricardo Alfonsín, Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde) para agregar seguidamente que nuestro país "no controla su espacio aéreo, marítimo y terrestre". "Estamos con las Fuerzas Armadas pobres, y colapsadas", sostuvo el ex funcionario, quien insistió en la necesidad de "recuperar el control de los espacios soberanos". Cabe recordar que en 1988, durante el gobierno de Alfonsín, se sancionó la Ley 23.554 de Defensa Nacional, la cual especificaba que para las amenazas internas están las FFSS y para las externas las FFAA. Esa norma fue reglamentada 18 años después por el decreto 727/06, del entonces presidente Néstor Kirchner, mientras se desempeñaba como ministra de esa cartera Nilda Garré. En esa disposición, de cuño kirchnerista, se limitaba el accionar de las FFAA, a enfrentar "solo fuerzas armadas de otro Estado" (es decir, Fuerza Armada regular de un Estado nacional), lo cual ya no sucede en los actuales conflictos bélicos. Por eso, ahora, merced al decreto 683, Macri oficializó la reforma militar, con la finalidad de "adaptar" las fuerzas para que estén listas para las amenazas del siglo 21 “terrorismo, ciberataques y narcotráfico”. "Estamos pobres. Y vamos a estarlo por bastante tiempo", destacó Jaunarena, al advertir que esa situación se da en el marco de una sociedad con "infinidad de reclamos". Es previsible que, en materia presupuestaria, los recursos destinados a Seguridad y Defensa, sean "limitados" y tenemos que administrarlos "con la mayor equidad y certeza", consignó.

Adiestramiento y equipamiento Por su parte, el analista político y director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría, Rosendo Fraga, fue consecuente con su postura, sustentada en distintos foros. Según el conocido especialista en temas militares, Macri asume que la Argentina tiene intereses concretos a defender, riesgos que implican amenazas, y que pueden requerir el empleo de las FFAA para repelerlos. En ese contexto se ubica la importancia del Atlántico Sur, la relevancia de la defensa aeroespacial (radarización), amenazas internacionales como el crimen organizado y los conflictos que crean inestabilidad regional. Según Fraga, la cooperación militar en la protección de la frontera, así como la lucha contra el narcotráfico, puede darse con el cambio jurídico y doctrinario que se ha implementado, aunque para ello, hace falta, entre otros factores, resolver lo inherente al adiestramiento, equipamiento, y el presupuesto militar. "Que una potencia tenga intereses nacionales, no quiere decir que vaya a actuar con Fuerzas Armadas nacionales", remarcó en analista político. "Estamos viendo potencias actuando en función de intereses nacionales, pero no con Fuerzas Armadas regulares, sino con todos los elementos", puntualizó. Previamente Fraga hizo una pormenorizada enumeración de hechos que son indiciarios de cómo se abordan los problemas de estrategia y defensa en otras latitudes. Desde ese ángulo, hizo mención del aumento del gasto militar en los EEUU, y el acuerdo sobre la soberanía del Mar Caspio suscripto por Rusia, Irán, Turkmenistán, Azerbaiyán y Kazajstán. También el disertante aludió a la prioridad de Nueva Zelanda por el sector ártico, y a recientes anuncios de Sebastián Piñera en Chile sobre modificaciones en el financiamiento de las capacidades estratégicas de las FFAA chilenas. Por último, y ante la consulta de uno de los asistentes al debate, Fraga ponderó la concepción de Estado de los países nórdicos, a los cuales definió como modelo de institucionalidad.

El marco económico Finalmente, y también en relación con la reforma del sistema de defensa nacional, fue aplaudida en varios tramos la exposición de Ricardo López Murphy, quien enfatizó que la Argentina "descuidó los deberes esenciales". "El objetivo central de todos los recursos del Estado y que hacen a su seguridad, sea interna o externa, es preservar el monopolio de la fuerza", reflexionó el ex ministro de Defensa (con actuación entre 1999 y 2001) durante la gestión del entonces presidente Fernando de la Rúa, para añadir seguidamente: "No hay política de Defensa, sin un marco económico". En esa misma dirección, señaló la persistencia, por parte de ciertos sectores, de una actitud estigmatizante respecto de las FFAA ¿pero que hubiera pasado si no hubieran intervenido? recordó el ex ministro, en relación al accionar de los militares en la lucha contra grupos guerrilleros desencadenada en la década del ´70. Desde esa perspectiva, López Murphy puso especial énfasis en la necesidad de recuperar capacidades, y plantear hipótesis de defensa. En opinión del ex ministro, gran parte de los argumentos que dieron lugar al decreto 727/06 (gobierno de Néstor Kirchner) es que "quieren que desarmemos el Estado, para poder imponer lo que no pudieron imponer. No hay que perder la perspectiva", insistió. Siempre, según López Murphy, las hipótesis de trabajo que separan la seguridad interna de la externa, y plantean amenazas solo de actores externos, son un "anacronismo" que obedece más a la realidad de la 2daGM. Finalmente, el ex ministro instó a descomprimir tanto el "cepo ideológico" como el "cepo económico" que afecta, en sus distintos niveles, al sector militar.

Lamentable retroceso en materia de Defensa

Por Horacio Jaunarena, ex-ministro de defensa – La Nación

En momentos en que las FFAA realizan el mayor despliegue operacional después de la Guerra de Malvinas;

(Fuente: wikipedia)

- para atender a necesidades de nuestra población debido a la pandemia de Covid-19, realizando tareas que en las condiciones actuales son las únicas que las pueden realizar;
- cuando gobernadores de provincias fronterizas solicitan al Gobierno el envío de tropas a zonas de nuestra frontera cuyo control adolece de serias fallas;
- cuando en Salta elementos de nuestras FFSS son atacadas con armas letales por grupos de contrabandistas;
- cuando el gobierno nacional dispone el cierre de la frontera a causa de la pandemia mientras tenemos más de 800 pasos clandestinos en los cuales diariamente entran y salen nacionales y extranjeros sin ningún control;
- cuando las FFSS, como la Gendarmería, tienen empeñado un importante número de su personal custodiando la seguridad en centros urbanos, como el Gran Buenos Aires, Córdoba y Rosario, y no pueden, como la ley de su creación lo dispone, abocarse al control de nuestros límites territoriales;
- cuando nos enteramos, por informes de la Armada chilena, que en un solo día atravesaron el Estrecho de Magallanes una flota de treinta barcos pesqueros chinos mientras nuestro mar sufre la depredación de sus riquezas por la pesca ilegal que realizan embarcaciones extranjeras gracias a la ausencia de un efectivo patrullaje;
- cuando se detecta la existencia de centenares de pistas de aterrizaje clandestino mientras nuestra FAA carece de un sistema en capacidad para hacer respetar nuestra soberanía en el aire;
¡y cuando todo esto sucede! el PEN, entre otras disposiciones, vuelve a poner en vigencia un decreto (727/06) derogado en su momento por el gobierno de Macri, por medio del cual se restringe el empleo de nuestras FFAA únicamente para los casos de agresiones "de Fuerzas Armadas pertenecientes a un Estado contra la soberanía, la integridad territorial de nuestro país... etc."
Volvemos, corregidas y aumentadas, a las disposiciones fijadas por nuestra ley de Defensa que eran justificadas y razonables en un mundo que existía hace 30 años pero que ya no existe más.
Para esta lectura de nuestra realidad “¡no existió el atentado a la Embajada de Israel, la voladura de la AMIA, el crecimiento exponencial del narcotráfico, la pérdida del control de nuestras fronteras, el crecimiento de la inseguridad en nuestra población, la aparición de verdaderos ejércitos no estatales con una capacidad que en muchos casos supera la de los propios ejércitos nacionales!”.

(Fuente: wikipedia)


La existencia de legislaciones en la mayor parte del mundo en donde las FFAA cumplen un rol importante cuando, por las características de las emergencias, son llamadas por los gobiernos respectivos en la defensa de la seguridad de los derechos constitucionales de sus habitantes. Mantener una legislación que en los hechos impide, como nos ocurre en la actualidad, y se agudiza con la existencia de este nuevo decreto, brindar a quienes participan de un adecuado sostén legal y una suficiente instrucción y equipamiento para atender los requerimientos que reciben, supone dar la espalda a la necesidad de satisfacer las exigencias que la realidad genera o verse obligado a mantener un comportamiento esquizofrénico entre una situación que requiere determinadas decisiones y una normativa que lo impide.
Una lectura correcta de lo que nos pasa, de lo que está pasando en el mundo y de los que nos puede pasar, es entender que el empleo del instrumento militar no depende de la localización geográfica del agresor o de su pertenencia o no a un estado, sino a las características que la agresión tiene, es decir el armamento que está utilizando, su poder letal, la logística que está empleando etc. Impedir el empleo de la respuesta adecuada o utilizar un elemento sin la instrucción, la doctrina y el equipamiento necesario para responder a la emergencia es exponer a severas consecuencias a quienes por patriotismo eligieron ofrecer su vida en cumplimiento de su deber.

(Fuente: seguridadinternacional.es)

El Ministro de Defensa, poco tiempo atrás, convocó a la tarea de buscar consensos para la modernización de ciertos aspectos de la normativa vigente en el ámbito de la defensa, se trata de una medida saludable, que inteligentemente avanza en el camino en el cual debemos buscar acuerdos si queremos dotar a nuestro futuro de un sistema de defensa acorde con nuestras necesidades. Persistir en ese camino y extenderlo a otros ámbitos de nuestra realidad es entender que es el único que nos permitirá salir del estado de postración en el que estamos y superar un futuro que se presenta lleno de interrogantes.