martes, 31 de octubre de 2017

El insomnio de Julio de Vido

(Por Horacio Palma)Julio…donde vos estás, estuve de visita mil veces!! Vas a ver que lo que tus jefes llamaban Hospital, es una mierda que no tiene ni gasas. Que lo que tus jefes aseguraban servía hasta para enfermos cardíacos crónicos, no sirve ni para una descompostura de estómago. A veces no hay agua... a veces no hay luz... o enchufas un horno en el toma incorrecto, y los días sin luz, se harán semanas. Desde las ventanas vas a ver rejas, algo de pasto.. y màs rejas. Y al fondo.. en el ala correcta.. vas a ver barrios humildes a los que ustedes les arruinaron la vida. Vas a ver que la mitad de los días no vas a tener agua caliente.. pero no importa.. según tus jefes de antaño, los viejos que estaban allí por haber combatido al terrorismo, no se merecían agua caliente…ni siquiera cagar escondidos. Mientas vos estas sentado en el inodoro, alguien se asomará por la ventana de la puerta solo para ver cagar al otrora todopoderoso señor. Y te va a caer la ficha, siempre cae, si valió la pena haberse cagado en tantos.. Sos un tipo inteligente Julio, se nota, por eso estoy seguro que esta noche te pasarán horas con insomnio, maldiciendo haberte encogido de hombros por tantos y tantos. Sabé que allí donde dormirás en las próximas noches, han dormido viejos muy dignos. Que no se ampararon en fueros, que no contrataron a un abogado por millones, que aguantaron estoicos ser atendidos en un lugar inmundo. Cuando quieras hablar por teléfono, tus familiares te reconocerán, si funciona el teléfono claro, por esa inigualable voz que avisa que la llamada proviene de un Establecimiento Penitenciario que, curiosamente.. le falta todo todo todo … lo que funcionarios y políticos comos vos y tus jefes.. se robaron durante una década. Las vueltas de la vida Julio… Suerte… y que tengas muchas visitas siempre. Porque la soledad, amiga de los malos tiempos, angustia y enferma los huesos.

lunes, 30 de octubre de 2017

Preocupante!!

Según un informe de inteligencia, RAM apuntaría a llamar la atención durante la cumbre del G-20 Un informe de inteligencia (atribuido a la Gendarmería Nacional) que está siendo analizado por distintos sectores del gobierno se explaya sobre la situación y probable evolución del conflicto mapuche: “Pese al significativo aumento de los atentados a personas y a propiedades realizados en los últimos dos años tanto en Chile como en la Argentina, la capacidad operativa de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) sigue siendo limitada y el nivel de entrenamiento de sus componentes es insuficiente para acciones de mayor envergadura”. El paper continúa señalando que “las contramedidas tomadas por las autoridades chilenas recientemente demostraron su eficacia”. Se cita como ejemplo “El retorno del mayor de Carabineros, Patricio Marín, al puesto de jefe policial en La Araucanía, luego de haber revelado hace tres años la identidad de uno de sus infiltrados en las comunidades mapuches, Raúl Castro Antipán, quien le anticipaba a los policías hechos de violencia en la zona. La nueva gestión de Marín, iniciada un año atrás, sumó al anuncio, conocido desde la comisión de Seguridad del Senado, respecto de la llegada a las regiones del Biobío, La Araucanía y Los Ríos de 266 efectivos policiales, que reforzaron el trabajo preventivo en la macrozona de la violencia rural”. Este operativo de los carabineros, siempre según el informe, habría sido “un factor importante para que RAM trasladase buena parte de su accionar a Neuquén y Chubut, que hasta poco tiempo atrás eran usadas casi totalmente como retaguardia o santuario para escapar a la persecución de las fuerzas chilenas”. Objetivos más ambiciosos En su parte final el informe se refiere a “los objetivos políticos de RAM y su intención de instalarse internacionalmente como un movimiento separatista de Chile y Argentina, cuyos reclamos sean discutidos en los foros diplomáticos multinacionales”. Con origen en “fuentes propias” el documento alude a que “la conducción de RAM estaría planteándose un plan de lucha dirigido a escalar en la figuración internacional del grupo y el escenario ideal para alcanzar este objetivo sería la decimotercera cumbre del G 20 a realizarse en Buenos Aires durante el 2018”. En función de este marco es que -continúa el texto- “RAM podría ir aumentando sus atentados en distintas ciudades patagónicas, para crear un clima mediático que los haga más notorios cuando los principales jefes de estado del mundo se encuentren en Buenos Aires”. Obviamente, este objetivo incluiría la probable realización de atentados durante la cumbre y tal vez en Buenos Aires, aunque se estima, como ya se dijo, que la limitada capacidad operativa del grupo no sería suficiente para afectar la seguridad del evento. Pero lo dicho se funda en esto que en mucho peor!!! Las FARC, el Foro de San Paulo y Compañía, van por toda Latinoamérica(Por María Celsa Rodriguez) El grupo terrorista FARC de Colombia y otros grupos peligrosos de la región latinoamericana, luego de la reunión del Foro de Sao Paulo en Europa, parecen haber modificado su estrategia para tomar el poder en toda la región por medio de la violencia, y esta vez lo harán fortalecidos con dinero del Islam radical. De acuerdo a recientes informaciones recibidas, sabemos que las FARC colombianas estarían operando en la cordillera patagónica, a través del puente de acuerdo tendido con la comunidad Mapuche, buscando sembrar el terror al tiempo que dicen “atacar al capitalismo”, con el supuesto objetivo de recuperar su territorio en la Patagonia mediante la expulsión de los actuales propietarios de esas tierras y de las empresas “transnacionales” allí instaladas. Desde hace varios años se sabe que en la zona de La Araucanía, en Chile, donde reside un grupo de la etnia mapuche, que también se encuentran diseminados en las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut en Argentina, estaría siendo entrenado por miembros de las FARC. Es más, la Cámara de Diputados chilena creó una comisión especial para investigar la inseguridad en la región de La Araucanía, donde se estaban dando focos delictivos de carácter terrorista (incendios forestales, destrucción de inmuebles, etc.) y la vinculación de ciudadanos chilenos en actividades paramilitares y su entrenamiento por parte de las fuerzas terroristas colombianas. La cordillera patagónica es un ambiente ideal para el entrenamiento militar de alto impacto, ya que cuenta con bosques y montañas similares a las de la geografía colombiana, y en materia fronteriza, se sabe que Argentina tiene un nulo control en los cruces de frontera, lo que lo hace altamente propicio para sus propósitos. ¿Cuál es el propósito de esta nueva alianza? Las FARC buscan extender sus territorios para desarrollar actividades terroristas, donde el tráfico de drogas ilegales constituye la mejor forma de financiarse. De manera similar a la que operan sus aliados del narcoestado de Bolivia que financian su “revolución” masista con la cocaína e impulsan el enfermizo ideal de un “Evo eterno”. La droga de las FARC se distribuye a través de las rutas ecuatorianas y va con destino a España, Nicaragua, Estados Unidos, Japón y Singapur, con bases en México y Venezuela. Algunas de estas rutas son de las FARC y otras son de otros carteles de narcotraficantes y se paga un “impuesto” para usarlas. Siendo Tumaco (en Colombia) la sede central más grande de la droga. Los guerrilleros son entrenados para manejar el negocio del narcotráfico, la venta de armas, y para encargarse de administrar de manera efectiva “los cristalizaderos”, donde se trabaja la pasta base de cocaína para convertirla en cocaína pura de máxima calidad, y luego poder distribuirla por distintas partes del mundo, siguiendo distintas rutas de Latinoamérica, por eso necesitan asentarse en puntos claves del territorio, para instalar depósitos fraccionadores para su posterior exportación. [3] Por eso es tan importante para ellos lograr el control territorial, y el acuerdo de “paz” decretado por el Presidente Juan Manuel Santos, evidencia un propósito aún más oculto para el público en general, que es el de perpetuarse en el poder en Colombia. Desde los años 60 hay una búsqueda constante de las FARC de establecer “zonas de reservas campesinas”, para controlar el cultivo de la hoja de coca utilizando el discurso socialista como una estrategia de convencimiento popular para obtener más poder. Ahora, buscan utilizar a los mapuches con ese objetivo, y Argentina y Chile se convertirán así en su centro de operaciones. Actualmente, las bandas criminales (Bacrim) que operan en el territorio colombiano con aliados estratégicos como el ELN y las FARC, son los que están manejando el negocio. Pero se sabe que también hay otros grupos guerrilleros disidentes de las FARC apoyándolos. También están Los Rastrojos, el Clan Úsuga y los grupos disidentes del ERPAC y desprendimientos de los cárteles de México que se asociaron para transportar drogas ilegales hacia los Estados Unidos. El narcotráfico hoy está ligado al mundo empresarial con sus propias ramas de operadores, especialistas y asesores que manejan esta multinacional del delito que mueve miles de millones de dólares por día, gracias a sus sucursales en toda Latinoamérica, y la complicidad de sus representantes políticos dentro de los gobiernos del socialismo del Siglo XXI. En Argentina fue el gobierno de los Kirchner, asociado con Cuba y Venezuela, los que dieron las llaves para que la droga colombiana ingrese al país para consumo interno y exportación. Las zonas calientes son la Provincia de Buenos Aires, Rosario y el norte del país, donde cuentan con centro de aterrizaje, campos de fraccionamiento, concentración y depósito desde donde se exporta la droga. Por otro lado “los jefes disidentes de las FARC que fueron expulsados de esa guerrilla por no asumir sus directrices, formaron una alianza con la banda criminal de origen paramilitar llamada Clan del Golfo para proteger sus rutas de narcotráfico”, se sabe que “cuentan con al menos 300 guerrilleros de las FARC en sus filas” y mantiene relación con el Cartel de los Soles, de Venezuela, operando en las fronteras de este país y de Ecuador, y su modo cruel de operación es reclutar jóvenes y mujeres, bajo amenaza y extorsión. Fuentes especializadas estiman que las guerrillas activas, cuentan con más de 13.000 integrantes diseminados en toda Latinoamérica. Como dijo el ex Presidente Uribe: “Las FARC han tenido dos triunfos que nunca habían esperado y que los concedió Santos: uno es el reconocimiento por parte de Estados Unidos y de Europa a pesar de que es el cartel narcoterrorista más grande del mundo. Ahora quieren imponer, a través de los acuerdos, un camino marxista leninista […] Nosotros tenemos que defender nuestra democracia contra eso”

El Gobierno buscarìa autorizar a las FFAA a combatir el “terrorismo interno”

Para lograr este cometido se deberán modificar tres leyes (Seguridad Interior, Defensa y Antiterrorista) con lo cual el Gobierno necesitaría un amplio consenso y podría implicar un alto costo político. Este proyecto (que generará gran polémica) se enmarca en un plan de reestructuración de las FFAA impulsado por el ministro de Defensa, Oscar Aguad, quien busca conseguir más presupuesto para la cartera que lidera. Recientes versiones periodísticas indicaron que Mauricio Macri analiza autorizar a las FFAA a luchar contra el narcotráfico y el terrorismo no sólo en las fronteras sino también puertas adentro del país. Este proyecto se enmarca en un plan de reestructuración de las FFAA impulsado por el ministro de Defensa, Oscar Aguad, quien busca conseguir más presupuesto para su cartera. La reforma que prepara Aguad, quien hace tres semanas anticipó en Córdoba que elabora un proyecto de reestructuración que "redefinirá el rol de las fuerzas militares", sería dada a conocer en breve, tras el espaldarazo que recibió el Gobierno e n las elecciones, según trascendió. Cabe destacar que esta posibilidad se encuentra hoy vedada por el decreto reglamentario de la Ley de Defensa Nacional, promulgado en 2006 por el entonces presidente Néstor Kirchner, que limitó el empleo de las FF.AA. únicamente ante "agresiones de origen externo perpetradas por fuerzas armadas pertenecientes a otros Estados". Según trascendió, esta posibilidad se evaluó en varias reuniones mantenidas la semana pasada entre Macri, el ministro de Defensa Oscar Aguad, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y el jefe de Gabinete Marcos Peña, entre otros. "Hay que entender que tanto el terrorismo como el narcotráfico ya no reconocen fronteras y si decidimos combatir esto con seriedad y eficiencia no vemos por qué no podemos poner a trabajar en esta lucha a las Fuerzas Armadas con los recaudos necesarios que se merece el tema", reveló un destacado funcionario que empezó a analizar con Macri y algunos ministros el tema. A la vez, la idea es que los militares también se ocupen del combate contra el terrorismo por medio de la ciberdefensa, en cooperación con la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y el Ministerio de Seguridad. Esta propuesta será complicada de aprobar y podría tener un alto costo político, ya que se deberán modificar tres leyes: Ley de Seguridad Interior, Ley de Defensa y Ley Antiterrorista. Para ello se necesitará "mucho consenso político" en todas las fuerzas partidarias y en la Casa Rosada confían en un eventual apoyo del Frente Renovador de Sergio Massa. Las versiones periodísticas también indican que la reforma avanza en la misma medida que fueron presentados los 4 Bechcraft TC6 Texan que el Presidente le compró a Estados Unidos por 160.470.000 dólares y que según anunció el ministro no serán empleados para combatir el narcotráfico sino para vuelos en la frontera. Según el diario La Nación, el avance armamentista también despertó negociaciones con Suecia para la adquisición de lanzadores de misiles de corto alcance los cuales llegarían mediante un préstamo en comodas cuotas. También hubo gestiones con Francia para evaluar la incorporación de cinco cazabombarderos Super Étendard, además de la provisión de materiales. Se trata de un sistema de defensa que fue desprogramado en Francia, utilizado en la Guerra de Malvinas, y cuya cesión sería considerada un gesto político del presidente Emmanuel Macron. Con la cabeza puesta en el G-20, el Gobierno aceleraría las modificaciones en Defensa y dejarían sin efecto la disposición del Gobierno de Néstor Kirchner agumentando que la reglamentación excedió lo dispuesto en la ley de defensa nacional, de 1988, que reservaba el instrumento militar a los ataques externos, no sólo de una fuerza estatal, indica esta versión.

Revocarán un decreto de Néstor Kirchner para ajustar las FF.AA.

Modificará el concepto de "agresión de origen externo" y avalará la ocupación de "objetivos de interés estratégico" para ampliar el espectro de la acción militar. La era del "reformismo permanente" que el presidente Macri dará hoy por iniciada con un acto en el Centro Cultural Kirchner (CCK), también tiene un capítulo castrense, que acarrea un borrón y cuenta nueva respecto al rol dado en la última década al Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea. Desde la llegada de Oscar Aguad, el Ministerio de Defensa en conjunto con la Jefatura de Gabinete, viene bosquejando un decreto que fijará nuevos lineamientos para las FFAA y disparará un "nuevo ciclo de planeamiento" y "una nueva política de defensa", tal cual esgrimieron dos fuentes del Edificio Libertador a este diario. Macri tiene previsto abolir el decreto reglamentario 727/2006, que puso en vigencia la ley de Defensa Nacional (23.554), sancionada en 1988, durante el gobierno de Raúl Alfonsín, pero que entró en vigor 18 años después, siendo presidente Néstor Kirchner y ministra del área Nilda Garré. Aquella reglamentación, interpretan los impulsores de la reforma, puso un "cepo" al accionar de las Fuerzas Armadas al establecer que el sistema de defensa nacional debía orientarse estructural y organizativamente "hacia la conjuración de situaciones de agresión externa perpetradas por fuerzas armadas de otro Estado". En el Gobierno ven necesario ampliar ese horizonte, considerado bajo la órbita de Defensa toda "agresión de origen externo", entre las que cabrían las organizaciones criminales trasnacionales y otros agentes de naturaleza no militar, denominados comúnmente como "nuevas amenazas". Las fuentes consultadas niegan que, bajo este nuevo marco, sea posible un involucramiento castrense en el combate al narcotráfico si así se lo define, más allá de las tareas de apoyo logístico y presencial que ya se brindan. Otro de los puntos fundamentales de la reforma permitiría a las FFAA ocupar "objetivos de interés estratégico" en el territorio nacional, que hoy permanecen a cargo de las fuerzas de seguridad, como Gendarmería y Prefectura. El objetivo, explican, es liberar efectivos destinados a tareas de vigilancia en centrales eléctricas o nucleares, reparticiones estatales u otros establecimientos, para que intervengan en operaciones amparadas por la ley de Seguridad Interior. De esa manera, el Gobierno podría sostener la demanda de gendarmes en zonas calientes del Conurbano y donde las estadísticas de delitos no ceden. El plan también prevé reformular los principios del accionar conjunto o "conjuntez", como dicen en los claustros militares con los consecuentes cambios en la lógica de despliegue, el entrenamiento y las adquisiciones de armas y equipos. Bajo este nuevo paraguas legal, confían en Defensa, estarán justificados para realizar a futuro nuevas operaciones de compra de armamento y nuevos ejercicios de adiestramiento y maniobras con otros países, hoy bloqueados en la Cámara de Diputados por la oposición del FPV.

CARTA DE UNA MADRE QUE LE RESPONDE A SERGIO MALDONADO, EL QUE SE REFIRIÓ A LOS GENDARMES COMO MAL PARIDOS...

Señor Sergio Maldonado: Ustedes piden respeto y los entiendo, ante todo los muertos merecen ser tratados con respeto. En esta carta, quiero creer escrita con dolor por la muerte de su hermano, lo cual es ciertamente lamentable. Yo también perdí un hermano, asesinado cobarde y arteramente, por el simple hecho de ser un Oficial Superior de la POLICIA FEDERAL ARGENTINA, por ende entiendo su bronca, su odio, y oh casualidad! mi hermano era el preferido de mi mamá. Usted es profesor de historia, por lo tanto sería necio de mi parte explicarle,sobre los mapuches, araucanos, tehuelches, etc, obvio debe saber que su hermano era "un huinca" para los mapuches (hombre blanco-enemigo).. Debemos expulsar la bronca, el odio (que supongo si su hermano era tan solidario detestaría). En su carta, usted trata a los gendarmes de "vómito de la naturaleza, que en lugar de hacerlo en el océano, lo hizo en el desierto vestidos de gendarmes", un poco fuerte y ofensivo lo suyo. Más adelante hablando del día de la madre dice" que las madres de los gendarmes no saben que tienen hijos ratas inmundas, hematofágicas, títeres asesinos...como ratas viven como ratas morirán" y finaliza "al que le quepa el uniforme que se lo ponga". Tengo hijos, conozco el dolor de perder un hijo, el dolor de su madre no lo cura nadie. Le voy a explicar algo sintético sin agresiones, porque creo que no sirven, sin ofensas, sin chicanas. Estuve casada con un Oficial de Inteligencia, profesor de la Escuela de Inteligencia del Ejército Argentino, nuestras hijas fueron en primer lugar tremendamente deseadas, criadas en un hogar con amor, respeto, con límites, muchas veces pienso que fuimos padres muy exigentes, pero cuidadosos de todo lo relacionado con ellas, escuela, amistades, juegos, salidas. Mi marido siempre les dijo que libertad e independencia eran algo más que una calle y las preparó para que supieran distinguir lo bueno de lo malo. Sabe una cosa, no parí "una rata inmunda" parí una niña que es una Mujer con principios, con ética, de moral intachable, luchadora, guerrera de la vida, que jamás baja los brazos, madraza ejemplar, hija extraordinaria, excelente hermana, amiga, solidaria, caritativa, excelente profesional; como todo ser humano tendrá sus errores pero los superan las virtudes… SABE PROFESOR MALDONADO: YO PARI UNA GENDARME, DE LA CUAL ESTOY SUPER ORGULLOSA COMO LO ESTA SU PADRE, SU HERMANA Y TODOS LOS QUE SABEN QUE CLASE DE PERSONA ES, LE REPITO PARI UNA GENDARME... ES DECIR UNA PERSONA DE BIEN.Y CON ORGULLO Y DIGNIDAD VISTE EL UNIFORME DE LOS HEREDEROS DE GUEMES.

Carriò asegurò que impulsarà la revisiòn de los juicios por “lesa humanidad” a los militares

Tras la clara victoria en las legislativas, donde obtuvo más del 50% de los votos, la diputada de Cambiemos Elisa Carrió pretende generar consensos y avanzar con una de las políticas de Estado que se llevaron adelante en la última década y que son observados como ejemplo internacional: los juicios por los delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura. Días antes de las elecciones, Carrió aseguró que va a impulsar una revisión de los juicios a los militares ya que considera que "hay militares condenados sin pruebas", aunque aclaró que "no es que hay presos políticos, es que hay casos muy mal juzgados". "Espero el consenso necesario para ver juicios de revisión en los casos que no haya pruebas. Porque realmente hay juicios donde no hay pruebas, hay otros juicios que tienen que quedar firmes y hay una situación que tiene que ser aplicada a todos por respetar los Derechos Humanos. Es que después de determinada edad, tu prisión es domiciliaria. Pero lo es en todos los casos?", advirtió en un acto en el barrio de Belgrano en el club Harrods Gath & Chaves cuyo video fue publicado por Infobae este domingo. En ese sentido, se refirió a la aplicación de la prisión domiciliara para los condenados y aseguró que es "una situación que tiene que ser aplicada a todos por respetar los Derechos Humanos. Es que después de determinada edad, tu prisión es domiciliaria". De manera genérica, Carrió sostuvo que "hay casos muy mal juzgados" y "procesos nulos", aunque reconoció que "en otros casos están muy bien juzgados", como el de los "torturadores directos". También distinguió entre "alguien de 21 años que obedecía a Nicolaides", "que le decían que estábamos en guerra", en "un enfrentamiento", a diferencia de alguien que torturó. "La esposa de un militar me dijo algo que quiero plantear acá mismo: '¿Cómo mi marido desobedecía a (Cristino) Nicolaides si tenía 21 años?' ¿Podía comprender esa persona, a la que le habían dicho que estábamos en una guerra, en medio de la violencia, a la que le decían que estaba luchando por la patria, que estaba instruida para obedecer? ¿Podía?", se preguntó. "La verdad que el kirchnerismo usó esto como venganza (…) A una determinada edad, la prisión puede ser domiciliaria, y que esto rige para todos. No puede ser que se mueran en las cárceles enfermos. Los derechos humanos son para todos", advirtió y añadió: "También los que ejercieron la violencia tienen que arrepentirse. Los que estuvieron en la guerrilla… ¿Porqué no tienen que respetar a la derecha? Porque resulta que hubo millones de argentinos que no estábamos con la guerrilla ¿Está claro? No estábamos con la violencia", advirtió.

lunes, 23 de octubre de 2017

No mientan màs!!

Sr. Ministro de Justicia y Derechos Humanos Dr. German Garavano De mi mayor consideración: Leer su nota en el diario “La Nación” del día 02 de Octubre del corriente año y, no obstante mi injusto y traicionero encierro como Preso Político detenido en el penal de San Felipe de la ciudad de Mendoza, fue el disparador de una serie de reflexiones que me permito expresarle. En primer lugar, esclarecer. Es primordial que todo ciudadano que ejerce un cargo público debe por sobre todo ser honesto, tanto intelectual como moralmente. Esta consideración, viene a colación de sus dichos que “…para construir el futuro, es necesario conocer el presente…”. Ello contrasta con la realidad, dado que de conocer usted bien el presente no podría dejar pasar por alto un aspecto central que originó el caos de la justicia cual fue el pacto tramposo entre Kirchner y Lorenzetti. Acuerdo que permitió el avasallamiento del derecho en la Argentina, especialmente la Constitución Nacional (C.N.) y, además, intoxicó la justicia (tal lo expresado por el Presidente en el cierre del Coloquio de IDEAS) e impuso por vías de la extorsión y la trampa la llamada “política de estado de DD.HH.”, tras utilizar a estos derechos como un telón para tapar la ola de corrupción que desbastó al país. Por ello, suena patético y brutal cuando ustedes expresan estas “ilusiones” mágicas de pretender “cambiar” y, por otro lado, continúan utilizando la justicia como arma de venganza y exterminio cínico con forma legal. No se puede pretender reformular, o generar nuevas políticas públicas en materia de justicia, sobre la base de estos pactos corruptos. De esta manera es construir sobre un campo minado. Ignorar y tapar ese pasado reciente que originó este presente no permite generar una justicia sana y creíble. Por ello sus expresiones suenan a una nueva estafa. Primero se debe extirpar ese tumor para poder implementar nuevos planes. Pues, por más ingeniosos que sean, no producirán el resultado esperado porque, como expresé, estará apoyado sobre acuerdos mafiosos y quienes deben aplicarlos son parte de ella. De nada valdrá una justicia con nuevas herramientas tanto tecnológicas como modernas, si sus hombres ignoran que actualmente se permite la violación de la C.N., en especial su artículo señero como lo es el art. 18. Violación que, a estas alturas, es tomada por las autoridades judiciales, comenzando por usted, como “muy normal”, tras ignorar que ello es consecuencia de aquel pacto mafioso Kirchner/Lorenzetti. Esto permite que se conformen tribunales con miembros de las bandas terroristas ERP y Montoneros, o con familiares y/o integrantes extremistas de “Justicia Legítima”. Tribunales que juzgan y condenan, sin pruebas, solo por ser militar o policía y por haber estado en un determinado destino, respaldando tales decisiones en fallos nacidos de aquel pacto vengativo. Estos jueces ignoran deliberadamente el sistema jurídico/legal que imperaba en aquella época y todo es convertido a un relato imaginario, digno de Franz Kafka. Ejemplos: detenciones legales que, a 40 años, se denominan “secuestros”; a un interrogatorio legal que se le dice “tortura”; lugar de detención como “centro clandestino de detención y tortura” (por más que se trate de tribunales de justicia o de unidades policiales). Leyes, decretos, disposiciones legales emanadas del estado constitucional de aquellos años es desconocido y considerado ilegítimo y, por ello, toda actividad o función desempeñada se la considera dentro de la teoría del “plan sistemático de terrorismo de Estado”. Funcionarios como usted que hoy, también de manera premeditada, ignoran este presente judicial, por más esfuerzo tecnológico que incorporen, lo único que logran es dejar un campo minado de injusticias cometidas que, como una maldición, asolará a través del tiempo al sistema judicial de la Nación. Usted habla de “modernizar” la justicia con nuevas herramientas y que a ellas hay que cargarle la información para que esta sea efectiva. Yo pregunto: ¿a qué información se refiere? ¿Será aquella que permita apresar a ladrones de gallina? Esto es manipular a la opinión pública con falsos discursos. Señor, la información más importante de hoy, para iniciar el camino del cambio de paradigmas, no necesita herramientas tecnológicas, solo necesita decisión política y coraje, para, bruscamente poner fin al pacto Kirchner/Lorenzetti y restituir la vigencia plena de la C.N. y aplicar correctamente el Tratado de Roma, pues la C.N. es el máximo instrumento jurídico que rige la República y hoy es violada especialmente en su aspecto de que no hay delito sin ley previa y las leyes no se pueden aplicar en forma retroactiva. Aquel pacto espurio abrió las puertas para que la legión de jueces prevaricadores arrasara con el estado de derecho, sepultando en el decenio 2003/2015 todo el prestigio del sistema legal argentino. Esto ha sido expresado por una mayoría de excelsos juristas de la talla de Badeni, Soler, Fayt, entre otros. También es bueno resaltar al ex integrante de la CSJN, Dr. Adolfo Vázquez, con su libro “Asalto a la Justicia”. Tampoco es necesario modernizar la justicia para que el “Estado argentino” denuncie de una vez por todas a los máximos funcionarios que gobernaron el país en los últimos 12 años y le digan a la sociedad cuánto dinero le robaron estas personas, dado que hoy se presentan como nuevos candidatos como si recién llegaran de Marte. Señor, no mientan más. No pongan como excusa que hay que dejar actuar a la Justicia y que estamos en un estado democrático, etc. etc., dado que denunciar el robo, malversación, administración fraudulenta, dilapidación de reservas, estafas a los tenedores de bonos, firma de pactos traicioneros no significa avasallar ningún poder del Estado. Es simple, Ud., como funcionario público, denuncie el robo de los 500 millones de dólares que Néstor Kirchner le saqueó a la provincia de Santa Cruz. ¿Dónde están? ¡Por favor, alguna vez ríndanle cuentas a la sociedad! Pregunto, ahora que esta justicia nos destruyó la vida, y la de nuestras familias… ¿salen a decir que hay que “cambiar el modo en el cual trabaja”? (Estos dichos de Lorenzetti fueron publicados en el diario MDZ Mendoza el 11 de octubre 2017). Es decir, este mamarracho de justicia, ¿sí puede ser utilizado y puesto de ejemplo ante el mundo para condenarnos sin pruebas y, con ello, tapar los errores políticos del pasado, pero no para encarcelar a las bandas de saqueadores de las arcas del Estado? Como verá, seguimos escuchando a este señor de la SCJN que nos dice: “… un ciudadano que se acerca a pedir justicia se encuentra con una estructura del siglo XIX…”. Esto es un discurso falso y cínico, pues pactó con Kirchner utilizar esa justicia para cometer un genocidio disfrazado de legalidad y de esa forma construir poder y permitirles a las bandas terroristas alcanzar la tan ansiada venganza y continuar la lucha hacia la toma del poder para instalar un gobierno totalitario. La sociedad argentina no se merece que se le siga mintiendo y engañando con discursos gramscianos. No le vendan humo. Si bien no hay que vivir del pasado, sí hay que modificar los atajos mafiosos construidos durante 12 años. Ya vivimos experiencias de “nuevas oportunidades”, por ejemplo el regreso de Perón en el ´73, Alfonsín y su “plan Austral”, Menen y su “pizza y champagne” y ni qué hablar de los últimos 15 años. Ustedes no escapan a las generales de esa ley, son hijos de ese pasado ruinoso, vienen de distintos sectores que se beneficiaron durante esos años de caos. Por ello, omitir aquel pacto espurio, disfrazado de política de Estado y permitir que uno de sus responsables continúe dentro del máximo tribunal de justicia de la Nación es, lisa y llanamente, una mentira y una estafa a la confianza y al futuro de la sociedad. Así, la suerte de éste pretendido cambio está cantada: será EL FRACASO. Por último, tampoco puede continuar ignorando en sus discursos a los cientos de integrantes de las FF.AA., FF.SS. y Policiales, los cuales debieron descender al infierno para llegar a las entrañas de las columnas de combatientes de Montoneros y las compañías militarizadas del ERP para poder derrotarlas. Así, Ud. hoy es ministro y goza del placer de ocupar un despacho climatizado y confortable, en libertad, cuando miles de aquellos silenciosos y obedientes soldados están injusta e ilegítimamente presos. Sin otro particular, lo saludo Atte. Juan Giovarruscio Preso Político Penal de San Felipe, Mendoza.

sábado, 21 de octubre de 2017

HASTA CUANDO??? Las Grietas.

“Solo cabe progresar cuando se piensa en grande solo es posible avanzar cuando se mira lejos Los hombres no viven juntos porque sí, sino para acometer juntos grandes empresas” - José Ortega y Gasset La crisis política que desde años sufre la Argentina, con la mitad de la población que tironea para un lado y la otra mitad para el lado contrario, ya se ha convertido en crisis institucional. La famosa "grieta" de la que hoy tanto se habla no es más que la punta del iceberg. Además, en rigor de verdad, deberíamos hablar de "grietas", en plural, porque la sociedad argentina no está atravesada por una línea divisoria sino por varias. Por un lado, desde su mismo origen, la Argentina nació con una división subyacente que se fue metamorfoseando y perpetuando hasta el día de hoy: realistas contra patriotas; morenistas contra saavedristas; unitarios contra federales; conservadores contra liberales; peronistas contra radicales; peronistas contra antiperonistas; peronistas contra gorilas; militares contra militantes; peronistas contra radicales otra vez; kirchneristas contra cualquier otra cosa. La lista es larga. Por el otro lado, la propia cultura demoliberal implantada en el país – tanto del liberalismo de derecha como del de izquierda y aun a pesar de las distintas variantes más o menos nacionales – ha aportado varias otras "grietas": ricos contra pobres; creyentes contra ateos; cultos contra ignorantes; burgueses contra el "aluvión zoológico" ; empresarios contra trabajadores; nacionales contra cipayos; "blancos" contra "negros"… Esta lista también es muy larga. El hecho es que la proliferación de "grietas" no es sino el reflejo de profundas fallas sistémicas subyacentes causadas por una ausencia de valores y una crisis moral que desembocan en la ausencia de una base de sustentación sólida para el poder político. Con un poder político eficaz y coherente, sustentado por un pueblo etnoculturalmente homogéneo, es difícil que se produzcan "grietas" insuperables. Por el contrario, con un poder confuso y vacilante tratando de conducir a una sociedad heterogénea, es prácticamente inevitable el surgimiento de líneas divisorias que desgarran a la sociedad intentando perseguir múltiples objetivos contradictorios. Cuando en cualquier sistema político la heterogeneidad de base no cuenta con una firme y eficaz conducción centralizada, lo que se impone no es la política sino la entropía por la cual en todo sistema de equilibrio dinámico el caos es siempre más probable que el orden, y ésta no es una opinión emergente de alguna ideología, es, simplemente, la aplicación consecuente del segundo principio de la termodinámica a cualquier sistema, incluso el político. La crisis del sistema A lo anterior se agrega la influencia de la actual política internacional orientada deliberadamente a la debilitación del poder político de los Estados tradicionales. En efecto, la estrategia general de la globalización es dejarle muy poco margen de maniobra a los Estados, durante los últimos años esto se ha visto de un modo singularmente nítido. En todas las crisis que ha padecido el sistema internacional desde el inicio del Siglo XXI, lo único que ha quedado inmune y confirmado es el modelo económico que el sistema financiero internacional ha impuesto – o por lo menos tratado de imponer – a escala global. Lo irónico del caso es que justamente ese modelo es el que ha contribuido en forma significativa a generar y a empeorar la enorme mayoría de los problemas que surgieron. Se ha dado así el caso casi increíble de un criterio que, por un lado, genera y aumenta los conflictos pero que, por el otro lado, ante cada conflicto es propuesto como la solución al conflicto que ese mismo criterio generó. Un círculo vicioso perfecto. "Los problemas de la democracia se solucionan con más democracia", o bien, "los problemas del libre mercado se solucionan con más libertad de mercado". Son frases que hemos escuchado hasta el hartazgo. ¿A nadie se le ocurrió pensar que eso equivale a decir algo así como "la gripe se cura con más gripe" o "la ignorancia se soluciona con más ignorancia? Para colmo de males, los gobiernos, más preocupados por cosechar votos que por hacer funcionar Estados, no sólo han quedado con muy poco poder real frente al poder del dinero sino que, además, tampoco han tenido la idoneidad adecuada para ejercer la escasa capacidad de decisión que les resta. Así, los políticos no solamente se han mostrado ambivalentes, dubitativos, lentos, contradictorios y prácticamente hasta complacientes frente a la crisis sino que, cuando por fin alguno se decidió a actuar, lo hizo mal y, en lugar de fortalecerse, terminó provocando su propia crisis interna. A estas horas en el ámbito del mal llamado populismo – y mal llamado porque no es más que simple demagogia – al menos una cosa debería haber quedado meridianamente clara: cuando a la confusión se le suma la ineptitud y ambas desembocan en un resentimiento clasista, la mezcla resulta explosiva. Las medidas que surgen de este ambiente intelectual pueden calificarse con tres conceptos: poco, tarde y mal. La cobardía demoliberal Muy en el fondo de la cuestión, todo lo que hemos vivido y padecido puede rastrearse hasta un defecto constitutivo e histórico del demoliberalismo. La cosmovisión demoliberal se fundamente en un miedo casi histérico al poder; el neoliberalismo ha heredado esto de la demagogia griega que mandaba a sus mejores hombres al ostracismo y lo ha institucionalizado distorsionando el esquema de Montesquieu al partir al Estado en tres "Poderes" que, en lugar de cooperar y complementarse, compiten, se traban, se espían y se denuncian mutuamente. La tergiversación en la que se basa este sistema es aquella que, en nombre de una mayor participación, confunde deliberación con decisión. Una deliberación participativa es siempre conveniente y hasta necesaria en algunos casos. Mientras más amplia sea la base deliberativa, mayores probabilidades habrá de que salgan a luz todos los aspectos relevantes de una cuestión, porque pocas veces hay algo mejor que enfocar un mismo tema desde todos los ángulos posibles. Preguntarle a un gerente qué sucede en la fábrica nos proporciona una respuesta que muchas veces refleja tan sólo lo que debería suceder. La misma pregunta hecha al jefe de producción, al jefe de mantenimiento, al contador, al jefe de personal, a los trabajadores y hasta al portero, nos proporcionará un cuadro muy confiable de lo que realmente sucede en el establecimiento, y la situación no es demasiado distinta en el ámbito político: la participación del Pueblo en la definición de esa realidad que es, al fin y al cabo la única verdad, resulta insustituible. Lo que el demoliberalismo esconde sistemáticamente es que una cosa es participar en las deliberaciones y otra muy distinta es participar en las decisiones. Una deliberación colegiada arroja luz sobre determinada cuestión. Una decisión colegiada, suponiendo que la misma sea posible en absoluto, lo único que hace es diluir la responsabilidad entre un número aleatorio de personas, por eso es que la politiquería, sea neoliberal o de izquierda, ama y adora las decisiones tomadas en asamblea mientras huye como de la peste de todas aquellas decisiones que deben ser tomadas en forma unipersonal, porque la decisión conlleva la responsabilidad. Quien toma decisiones debe hacerse responsable por las mismas, y quien ejerce el poder debe hacerse responsable por las consecuencias que ese ejercicio ha acarreado y, por supuesto, si se le tiene miedo a la responsabilidad, la consecuencia inmediata es que se termina teniéndole miedo al poder. Pero, aún con ser fundamental, este no es el único aspecto a tener en cuenta porque además de ello, si el poder político — al menos según la teoría demoliberal — está disponible para cualquiera, es prácticamente inevitable que traten de recortarlo, disminuirlo, constreñirlo, controlarlo, cercarlo y hasta condicionarlo todos aquellos que esperan su turno en la larga fila de los aspirantes al puesto. De este modo la crítica política deviene en chicana — cuando no en sabotaje encubierto — porque, en realidad y por más que todos se llenen la boca con discursos afirmando lo contrario, el fracaso de un gobernante abre las puertas para el próximo aspirante al cargo. El gran argumento que se agita en esto es que, supuestamente, el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente. La frase es ingeniosa y no del todo carente de ejemplos históricos desgraciados, concurrentes a abonarla, sin embargo, como todas las frases ingeniosas pero superficiales, pasa por alto varios hechos básicos. En primer lugar sólo se puede corromper a alguien que está dispuesto a ser corrupto, y, en segundo lugar, para la corrupción — al igual que para bailar el tango — hacen falta al menos dos: uno que acepte ser corrompido y otro que elija a la corrupción como método normal de operación. En última instancia, el dinero también corrompe y el "dinero absoluto" — aquél que, como nuestra deuda externa, ya tiene tantos ceros que se vuelve mentalmente inabarcable — corrompe no menos absolutamente. Resulta por lo menos curioso que el neoliberalismo propugne a grandes voces un rígido control del poder político y, simultáneamente, se oponga terminantemente al control del dinero; máxime teniendo en cuenta la dependencia directa que la política tiene hoy de ese dinero que, cuando no es la fuente, al menos es el instrumento preferido de la corrupción. Poder y Estado El criterio neoliberal con el que hoy juzgamos los hechos y los acontecimientos políticos está profunda y básicamente errado. En primer lugar, el Estado no tiene, en realidad, "Poderes" fundamentales sino funciones esenciales y complementarias, y, precisamente porque estas funciones son complementarias, el poder político tiende, en forma natural, a unificarse. La funcionalidad complementaria exige coherencia de criterios y para que esa coherencia sea realmente eficaz, se necesita unidad de decisión o sea — lo que en política es indispensable — unidad de poder. Lo primero que un Estado necesita es capacidad de planificación estratégica; sin un verdadero plan, bien diseñado, bien estructurado y bien ajustado a la realidad, el discurso político naufraga en simples expresiones de deseos, declamaciones ideológicas y promesas demagógicas que después nunca se cumplen. La primera función del Estado es planificar y prever: prever un futuro en términos necesariamente positivos y planificar las alternativas de acción y de opción para alcanzarlo, y esta es ya la primera falla que podemos detectar en nuestro Estado actual: 1) Por un lado nuestros insignes políticos hablan de "nuevas formas" de hacer política y del "futuro de grandeza" que supuestamente nos espera tras un ingreso al "primer mundo" en condiciones de "mayor equidad" social. Pero nadie se ha tomado el trabajo de definir esas metas de una manera objetiva, como que tampoco nadie ha hecho aunque más no sea un listado de las acciones concretas y de los objetivos puntuales, verificables, que es preciso cumplir para alcanzar esas metas. 2) Por el otro lado, explícita o implícitamente, hemos aceptado una planificación económica impuesta por la globalización, de modo tal que no solamente no tenemos un plan político coherente sino, para colmo, hemos comprado en el exterior un "modelo" económico que fue construido sin tener en cuenta para nada nuestros propios intereses y nuestras propias necesidades, así, no es ningún milagro que tengamos un Estado que gobierna más para los "inversores" que para su propio Pueblo, esperando que el capital financiero internacional termine resolviendo todos los problemas que la incapacidad política y el egoísmo codicioso de nuestros dirigentes impide resolver. Lo segundo que el Estado necesita es capacidad para construir consensos: nunca, en ninguna parte, bajo ninguna circunstancia histórica se ha dado el caso de un consenso absolutamente unánime dentro de un organismo político que abarca a millones de seres humanos. La unanimidad de la voluntad general es un escollo contra el que se estrelló hasta la teoría de Rousseau, pero, para que esa capacidad de síntesis pueda ejercerse; para que el Estado sea, en absoluto, creíble en su intención de lograr consensos y sintetizar divergencias, no sólo debe existir la estrategia en nombre de la cual se construye ese consenso sino que, además, el criterio sustentado por la política estatal debe estar libre de sectarismos. Tenemos que entender de una vez por todas que el Estado no gobierna a la comunidad sino en nombre de la comunidad, y esto significa que no gobierna en nombre de un sector, una clase social, una división, porción o fragmento de la comunidad, sino en nombre de todo el conjunto, entendido éste como un organismo político indivisible. Y lo tercero que el Estado necesita es capacidad de conducción: para ello debe tener, como mínimo, capacidad para tomar decisiones adecuadas, oportunas y responsables; no es suficiente con que cierta clase dirigente goce de una imagen de liderazgo mediático, cuidadosamente construido por los expertos en relaciones públicas y los especialistas en ingeniería de imagen para su difusión por los medios masivos. Mucho menos alcanza con que cierta jauría periodística, con el viejo truco de presentar su caprichosa interpretación personal de la opinión de la gente como Opinión Pública manifiesta, trate desesperadamente de "preservar la imagen" de ciertos dirigentes, o de ciertos cargos políticos, o de ciertas instituciones, con la ya casi universal excusa de "mantener la gobernabilidad" del sistema. Si hay crisis de gobernabilidad es porque hay crisis de conducción, y si hay crisis de conducción es porque las decisiones se toman mal; ya sea porque se tardan meses y hasta años en tomarse; ya sea porque se negocian en forma colectiva para que nunca aparezca un responsable que pueda ser individualizado; ya sea porque se toman optando por las medidas equivocadas; ya sea porque se aceptan obvinamente decisiones que han sido tomadas por otros en los centros de un poder supranacional que tiene la muy inteligente costumbre de negar su propia existencia. Reconstruir al Estado Tenemos que reconstruir a nuestro Estado y debemos abandonar el miedo al poder y atrevernos a ejercerlo en su plenitud, en beneficio de la Argentina y de los 40 millones de habitantes que viven en ella. Para ello; 1) lo primero que necesitamos es un verdadero Proyecto Nacional, con metas claramente definidas, y plasmado en un Plan de Acción con objetivos coherentes, viables, realistas y verificables; 2) lo segundo que necesitamos es construir un consenso auténtico y genuino alrededor de esta estrategia; sin sectarismos y sin exclusiones dogmáticas; en el sincero entendimiento de que la Argentina es de todos los que estén honesta y honradamente dispuestos a trabajar en ella y por ella. y, finalmente, debemos ser capaces de aglutinar en una gran fuerza política a personas con suficiente idoneidad profesional, capacidad de decisión y autoridad moral como para ejecutar el Plan y alcanzar las metas del Proyecto. Una Argentina mejor es posible. Pero no es cuestión de quedarse en soñarla. Lo que hay que hacer es construirla. Lo trágico es que esto ya debería saberlo todo el mundo porque, de hecho, se viene diciendo por lo menos desde hace 78 años. Desde que José Ortega y Gasset lanzara en 1939 la consigna: "¡Argentinos, a las cosas, a las cosas!" Pero parece que nadie se quiere hacer cargo de esa consigna, y ése es el problema!!.

viernes, 20 de octubre de 2017

Un fallo judicial dice que debe aplicarse al personal retirado el monto de los suplementos que fija el decreto 1305/12 respecto del haber mensual del personal militar

La sentencia de grado, publicada el miércoles (27 sep 2017) por el Diario Judicial (que fue revocada por los jueces Luis Herrero y Nora Dorado), ordenó que se les abone el adicional establecido por los Decretos 1305/2012 y las modificaciones establecidas por los decretos 245/2012 y 614/2014, pero les otorgó a los aumentos el carácter de “no bonificable”. El decreto crea los Suplementos por “responsabilidad jerárquica”, que es el que tiene tiene derecho a percibir el personal militar en actividad, destinado en el país, que ha sido nombrado para desempeñar un cargo que signifique el ejercicio de responsabilidades directas en la conducción del personal, mientras ejerza dicho cargo y por “administración del material” para el militar en actividad, destinado en el país cuya función implique la administración del material, mientras ejerza dicha función. El Estado Nacional pretendía que se les otorgue carácter particular a esos suplementos, argumento que fue rechazado por los camaristas. “El Poder Ejecutivo Nacional procuró mediante los porcentajes contemplados en el art. 2º del decreto 1.305/2012, atribuir carácter de suplementos particulares a los mismos, apartándose de la norma legal específica que los regula (art. 57 de la ley 19.101), e implementando procedimientos de cálculo incompatibles con el carácter particular que la demandada pretende asignarle”, precisaron. En ese sentido, la Cámara remarcó que el porcentaje de efectivos que no percibe ni el “Suplemento por Responsabilidad Jerárquica” ni el “Suplemento por Administración de Material” es menor o igual al 2% de efectivos de un mismo grado, “con las únicas excepciones de los Soldados Voluntarios (35%) y Soldados Voluntario de 1ra. (11%)”, y que pese a ello tanto los Soldados Voluntarios como los Soldados Voluntario de 1ra. en muchos casos perciben la “Suma Fija Transitoria/Permanente” también contemplada en el Decreto 1305/2012 y 855/2013. Para los magistrados, en definitiva, más allá de la denominación que se intente asignarle por vía reglamentaria a los suplementos creados por el Decreto 1305/2012, los mismos “ostentan carácter 'general', 'remunerativo' y 'bonificable', debiendo incorporarse al “haber mensual” del recurrente (Dto. 1081/2005), el suplemento que le hubiese correspondido percibir de haber continuado en actividad”.

Interesante: Hacia el 2019

(Por Vicente Massot) Cuando faltan horas para que se substancien en todo el país las elecciones legislativas previstas para el 22 de octubre, nadie en el espacio reservado a la política ni tampoco analista o encuestador alguno —que no se halle ideológica o crematísticamente vinculado a Cristina Fernández— se llama a engaño respecto del resultado. No sólo en la decisiva puja que sostendrán en la provincia de Buenos Aires el candidato de Cambiemos, Esteban Bullrich, y la ex–presidente de la Nación las opiniones son unánimes en cuanto al éxito seguro del oficialismo. Se descuenta también que en el porcentaje final de los votos —una vez computada la totalidad de los distritos— la tropa de Mauricio Macri conseguirá superar, en algunos casos con creces, su performance de las PASO. A esta altura, ningún otro escenario es concebible y, por lo tanto, comienzan a cobrar forma una serie de reordenamientos que no se circunscriben a los partidos, movimientos y principales figuras del tinglado político. Por razones que no es necesario explicar, todo es ebullición en el peronismo. Tras bambalinas y sin que sea menester esperar a que se abran las urnas, los gobernadores que responden a esa bandería —con la sola y atendible excepción de Alicia Kirchner—; la cabeza de la bancada justicialista en la cámara alta; buena parte de los diputados que se hallan situados en las antípodas de Cristina Fernández; Diego Bossio y quienes le responden en la cámara baja; y los dos candidatos del tronco peronista que saldrán más lastimados del trance electoral —Sergio Massa y Florencio Randazzo— han iniciado una ronda informal de conversaciones y de negociaciones con el propósito de recomponer la unidad perdida. Cuanto era imposible antes de llevarse a cabo las internas del pasado mes de agosto se ha transformado ahora en obligación para un peronismo que se niega a darse por muerto pero, al propio tiempo, sabe cuán frágil es su armadura luego de la derrota que le ha infligido Macri. No hay quien no sea consciente de la debilidad que deberán sobrellevar hasta tanto no sean capaces de hacer pie y de recomponerse con base en una unidad y un jefe que —de momento— brillan por su ausencia. Los de mayor lucidez perciben que el desafío que tienen por delante no sólo es bien difícil sino que llevará tiempo asumirlo y resolverlo exitosamente. Con todo, han puesto en evidencia que sus reflejos están intactos. La derrota, sumado al hecho de tener que transitar el llano, lejos del poder, son realidades que ayudan a disciplinar la voluntad. Por eso, la reacción que cruza en diagonal los pliegues siempre amplios del peronismo no se ha hecho esperar. Todos hablan con todos y si bien la lucha de egos y los intereses personales no pueden disimularse, de este cabildo abierto tácito —por llamarle de alguna manera— nadie ha sido excluido. Sólo el kirchnerismo fue dejado de lado. Es de tal magnitud la actual dispersión justicialista, son tantas las facturas que todavía unos y otros se pasan por rencillas pasadas, y resultan tantos los candidatos con pretensiones de asumir la jefatura del Movimiento, que la unidad es apenas un proyecto de final incierto. A los peronistas no los une el amor como el espanto a desaparecer de la faz de la tierra. Sin la soberbia que los ha caracterizado en las épocas que detentaron el poder y lo ejercieron a discreción, hoy se han vuelto realistas producto de los golpes que han debido asimilar. La idea que se baraja en las reuniones antedichas es forjar una suerte de confederación de poderes para que la negociación que deberán entablar con el oficialismo desde principios de noviembre no resulte tan despareja. De buenas a primeras no van a regresar al seno justicialista en dulce montón. Tratarán —eso sí— de conjugar voluntades sin perder su individualidad y sin poner el carro delante de los caballos. Dicho de otra manera: lo que se intenta es delinear una estrategia de buena vecindad —no de lucha— con el gobierno, sin que ello suponga abdicar de las responsabilidades propias de cualquier variante opositora. Si prosperase, sería un primer paso dado en pos de la unidad futura. Como se comprenderá, Cambiemos mira estas manifestaciones con natural beneplácito. Es más, alienta, en la medida de sus posibilidades, los intentos centrípetos de las diferentes ramas del peronismo con la convicción de que nada podría resultarle más provechoso. Sentarse a negociar civilizadamente con un conjunto de opositores dispuestos a respaldar la gobernabilidad y a sacarse de encima el lastre del kirchnerismo, representa una ventaja inmensa para Macri, que —además— comienza a tejer planes para después de 2019. Una cosa es no trasparentar su euforia antes de tiempo y convocar a sus seguidores a no dejarse ganar por un exitismo que podría, a la larga, resultar fatal. Otra es que frente a su círculo íntimo no exteriorice su confianza en un triunfo contundente y no piense en la reelección. El presidente sabe que se encuentra en una situación cómoda. En atención al apoyo de la gente y al cambio de expectativas en los mercados que ha generado su triunfo, al espacio de maniobra que se le ha abierto debe aprovecharlo al máximo. En este orden de realidades, ha tomado en las últimas semanas una serie de decisiones que delatan su voluntad de utilizar el poder sin que le tiemble el pulso. Por líneas interiores le ha hecho saber a no pocos popes sindicales que no aceptará condicionamientos de su parte, como los que enderezaron en décadas anteriores contra los gobiernos de Raúl Alfonsín y Fernando de la Rúa. El mensaje fue claro y los sindicalistas —que de zonzos no tienen un pelo y conocen cuándo apretar y cuándo retroceder— han puesto las barbas en remojo. Habrá en la CGT reacomodamientos que sólo hallan explicación con base en la victoria que obtendrá Cambiemos el 22 de octubre. Los planes de lucha y las amenazas de antaño han desaparecido, y en su lugar son los dialoguistas dentro del movimiento obrero organizado los que llevan la batuta. El ejercicio de la autoridad llegó también al campo empresario. Como uno de los banqueros más poderosos de la City, con fluidos lazos primero con Carlos Menem, luego con Néstor y Cristina Kirchner, y finalmente con Sergio Massa, amenazaba quedarse con la operación en nuestro país de una entidad financiera extranjera que vendía sus activos, la Casa Rosada lo impidió. No por capricho sino por juzgar que el interesado no reunía las condiciones de idoneidad necesarias. De la misma forma fue claro el presidente con un empresario mendocino, a quien conoce desde hace tiempo, respecto de la inconveniencia de comprar las empresas que deseaba venderle Cristóbal López para salir de la calamitosa situación en la cual se encuentra. Luego de la advertencia presidencial, el negocio en ciernes quedó en la nada. Andarse con vueltas parece no figurar en la agenda macrista.

martes, 17 de octubre de 2017

El encuentro nacional de mujeres.

(Por Agustìn Laje) “Matá a tu papá y a tu novio y a tu hermano”. Se trata de una de las tantas consignas pintadas en las paredes de edificios públicos y privados chaqueños por las militantes feministas que participaron del 32º Encuentro Nacional de Mujeres. La frase complementa muy bien a otras ya conocidas, como “muerte al macho”, “abortá al hombre”, “María abortó a Jesús”, “Somos malas, podemos ser peores”, “Abortá la heterosexualidad”, “Hetero muerto abono para mi huerto”, “Hacete torta la vida es corta”, etcétera. Y expresa muy bien, por otro lado, el cierre de la convocatoria: brutales agresiones contra hombres que de manera pacífica pusieron sus cuerpos frente a la Catedral que pretendía ser incendiada. La violencia del Encuentro Nacional de Mujeres ya no sorprende a nadie: se ha vuelto un clásico en nuestro país. Lo que sí sorprende es la poca capacidad crítica respecto de lo que año a año se reitera de manera sistemática: ¿la violencia es consustancial al movimiento en cuestión, o apenas una manifestación accidental? Muchos dirán, en efecto, que estos “excesos” no representan el espíritu del encuentro, pero lo cierto es que cada año el exceso se vuelve más excesivo, y la autocrítica brilla por su ausencia. A muchos les cuesta aceptar esta nueva cara del feminismo: su cara actual y, además, hegemónica. Muchos quisieran seguir creyendo que el feminismo es un “movimiento por la igualdad” y no por la supremacía, por “la paz” y no por la violencia. La sola idea de criticar un encuentro de mujeres los aterra. ¿Se imaginan la reacción social, política y mediática si, contrariamente, se tratara de un Encuentro Nacional de Hombres que impulsara consignas como “matá a tu mamá y a tu novia y a tu hermana”, “muerte a la hembra”, “abortá a la mujer”, y culminara con palizas a mujeres alegremente filmadas y subidas a las redes sociales? Hay que asumir de una vez que la “igualdad” y la “no violencia” son meras pantallas del feminismo de nuestros tiempos: la primera ola del feminismo, ésa que en su momento representaron mujeres como Mary Wollstonecraft (su “no deseo que las mujeres tengan poder sobre los hombres, sino sobre ellas mismas” sugiere un interesante contraste), y que hoy todavía representan algunas aisladas filósofas como Christina Hoff Sommers, parece ser ya cosa anticuada y políticamente inorgánica. El actual feminismo se trata de algo bien distinto, y el Encuentro Nacional de Mujeres confirma cada año que aquél se ha edificado como una ideología radical articulada no tanto por el amor a la mujer, sino más bien por el odio hacia el hombre. El feminismo devino en hembrismo, es decir, en la contracara del machismo. Eso significa, precisamente, “matá a tu papá y a tu novio y a tu hermano”. Significa que, independientemente de quién sea tu padre, tu novio o tu hermano, su sexualidad es un argumento suficiente para promover su muerte. Una guerra subterránea ha sido declarada. La liberación femenina se vuelve una función de la extinción masculina, bajo una “dialéctica del sexo” (parafraseando a la feminista radical Shulamith Firestone) que marca la dinámica de un conflicto sexual pretendidamente irresoluble. El hembrismo feminista es una ideología que, como tal, tiene sus ideólogas que marcan el sentido de la praxis política. “Quiero ver a un hombre golpeado, ensangrentado, con un zapato de tacón clavado en la boca, como una manzana en la boca de un cerdo” aseveraba Andrea Dworkin, autora de libros como Mujer que odia (1974). “Llamar al hombre animal es halagarlo; el hombre es una máquina, un mero consolador andante” escribía Valerie Solanas en su Manifiesto SCUM (1967). “Creo que el odio a los varones es un honorable y viable acto político” decía Robin Morgan, editora de la revista feminista Ms.y autora de libros como Un credo de mujer (1995) y Palabras de lucha (2006). “Cuando una mujer alcanza el orgasmo con un varón, está colaborando con el sistema patriarcal y erotizando su opresión” anotaba Sheila Jeffreys, autora de obras como La he rejía lesbiana (1996). “La proporción de varones debe ser reducida y mantenida en aproximadamente el 10% de la raza humana” sentenciaba Sally Miller Gearhart, autora de libros como El futuro (si hay alguno) es femenino (1981). Monique Wittig, por su parte, autora de El pensamiento heterosexual (1992) le dirá a la mujer que debe convertirse en lesbiana como forma de “rechazo del poder económico, ideológico y político de un hombre”. El hembrismo es una ideología feminista o, dicho de otra forma, es la manifestación actual y hegemónica de la ideología feminista. Estos pensamientos de estas destacadas teóricas feministas explican muy bien lo que se vive año tras año en el Encuentro Nacional de Mujeres. La pregunta que siempre queda después de estos episodios es: ¿acaso representan verdaderamente estas mujeres a la mujer argentina, o simplemente se trata de una minoría radical activa, bien organizada, movilizada y, sobre todas las cosas, cuidadosamente resentidas por ideologías extremistas? El generalizado repudio que año a año reciben por parte de la ciudadanía que aguanta (y paga) sus daños y ataques, indicaría que se trata más bien de lo segundo.

Cabezas, Lòpez, Maldonado...

(Por Vicente Massot)Seamos sinceros, por una vez, aunque ello signifique reducir a escombros uno de los tantos mitos erigidos desde hace décadas por las tribus progresistas y los cultores de lo políticamente correcto: ¿quién se acuerda de José Luis Cabezas? —Nadie que no forme parte de su familia y del conjunto de sus amigos. Pero no es este el único olvidado. La misma pregunta podría hacerse respecto a Julio López y valdría para él idéntica respuesta. Sólo cuando desapareció el activista mapuche Santiago Maldonado alguien recordó, por vergüenza, el caso del albañil a quien se lo tragó la tierra durante el gobierno de Néstor Kirchner. De no haber sido por ello, seguiría en el limbo. Que el fotógrafo de la revista Noticias, López, y tantos otros hayan desaparecido de la primera página de los diarios y de la consideración pública en general no supone —al menos no necesariamente— que la sociedad argentina desconozca con llamativa facilidad lo que, en su momento, se comprometió a no hacer. Sencillamente pone al descubierto que hechos como los señalados más arriba —todo lo trágico que se quiera— están destinados a ser abandonados por los medios masivos de difusión y por la opinión pública luego de un determinado tiempo, que varía según las circunstancias. Con Maldonado pasara exactamente lo mismo, más allá de cuál sea la deriva del caso y cuál sea el desenlace del mismo. Por ahora, todos hablan de él y cada uno de los periodistas, funcionarios, políticos, ransform. y militantes que levantan la voz para ocuparse del tema, tejen teorías y extraen conclusiones como quien se sienta a perorar en un café o en una tribuna pública. Fenómeno, éste, que delata dos cosas: por un lado, la inveterada vocación de los argentinos de hablar de todo lo divino y lo humano con la particularidad, además, de ideologizar la cuestión debatida; por el otro, la falta de seriedad de los factores sociales y políticos que tienen arte y parte en el asunto. Un juez que decide por las suyas, sin fundamento jurídico ninguno, pero pensando siempre en el qué dirán, centrar la investigación fuera de los territorios que los mapuches consideran sagrados. Consagra así la existencia de dos soberanías dentro del mismo país y de dos códigos para juzgar a los que —se supone— son ciudadanos argentinos. Por supuesto, nadie le pide explicaciones. Un ministro de Justicia al cual no se le ocurre mejor idea que solicitar ayuda a las Naciones Unidas y formar un comité para tratar el caso. Una rama de la Procuración que obedece a Gils Carbó que presenta un papel anónimo, obviamente fraguado, con sellos falsos de la Policía Federal, en calidad de prueba. Lo inconcebible es que ahora figura en el expediente y los principales medios porteños lo toman cual si fuera un dato de la máxima importancia. A ello es conveniente agregarle los testigos interesados en inventar una cacería de brujas por parte de la Gendarmería que se contradicen entre sí e —inclusive— se contradicen ellos mismos. Si no fuera porque Santiago Maldonado a esta altura podría estar muerto, lo que se ha desarrollado desde el momento en que se denunció su desaparición hasta el momento es un escándalo grotesco. El gobierno a la rastra de los acontecimientos, tratando de sacarse de encima la acusación que contra la administración macrista han levantado sus enemigos; el kirchnerismo buscando extraer del asunto un rédito electoral que tanta falta le hace; los mapuches radicalizados, a quienes una víctima mortal les viene de perillas, victimizándose como si fueran carmelitas descalzas y no miembros de una organización delictiva; la mayoría de los periodistas transformados en sabelotodos y una parte de la sociedad —la que se interesa en el caso— sin saber a qué atenerse. Nadie sabe lo que sucedió con Santiago Maldonado y existe la probabilidad que nunca se sepa. Más allá de lo que pase —sea que aparezca con vida, que se encuentre su cadáver, o que permanezca desaparecido para siempre— lo cierto es que se ha transformado en un hecho político, básicamente por dos razones: su militancia junto a uno de los mal llamados “pueblos originarios” y el cronograma electoral. Dicho en otros términos: si el militante de RAM hubiese pertenecido al partido de Alejandro Biondini a nadie le hubiese importado y no habría habido ninguna grita mediática ni política; si en los comicios que se substanciarán el próximo 22 de octubre en la provincia de Buenos Aires no interviniesen dos facciones enemigas — a las que separa no una grieta sino un abismo — la desaparición no se habría convertido en semejante escándalo. Pero las cosas son como son! Maldonado es un activista de izquierda y en el territorio bonaerense se juega mucho más que la elección de tres senadores y unos cuantos diputados. Esto plantea la incógnita de qué tanto puede influir en el ánimo de los votantes el tema. Cristina Fernández y muchos que no pertenecen ni a su círculo áulico ni son simpatizantes de Unidad Ciudadana piensan que si ocurriese lo peor y el activista mapuche fuese hallado sin vida, el desenlace podría costarle caro a los candidatos de Cambiemos. Es en virtud de esta convicción que la ex–presidente de lo único que habla, salvo excepciones, es de Maldonado. En la vereda de enfrente Mauricio Macri y la mesa chica que le ayuda a tomar las decisiones — Marcos Peña, Jaime Durán Barba, María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta — están convencidos de que difícilmente la parte decisiva del electorado — que cerró filas en agosto con Massa y Randazzo — vaya a votar en contra del gobierno por el caso Maldonado. Al mismo tiempo son conscientes de que, respecto al mismo, han perdido la iniciativa. La agenda es hoy casi un monopolio de los medios y del kirchnerismo que no se cansan de dudar o de estigmatizar, según sea quien se trate, a la Gendarmería, a Patricia Bullrich y al presidente. En el proceso que se ha abierto y tiene un final incierto, sólo un escenario disparatado podría modificar la intención de voto de los indecisos y abrir el camino para un triunfo de Cristina Fernández en octubre: que Santiago Maldonado apareciere muerto, se comprobase que fue por culpa de un gendarme y que detrás del hecho estuviese el gobierno nacional.
Caso Maldonado: todo lo que hay que saber para entender lo que sucede. (Por Antonio Caponnetto) ‒ Si los supuestos o reales indios cortan la ruta, se llama resistencia ancestral. Si los gendarmes restituyen la viabilidad del camino obstaculizado, se llama salvaje represión. ‒ Si a uno o varios gendarmes le fracturan los pómulos a pedradas, se llama rebeldía atávica. Si los gendarmes devuelven los cascotazos, es genocidio. ‒ Si diez adoquines son arrojados por un mapuche resulta autodefensa. Un guijarro lanzado por un gendarme es discriminación racial y violencia étnica. ‒ Si grupos de mapuches incendian iglesias y matan a los que están en ellas, es afirmación de la identidad originaria. Si los gendarmes corren a los agresores para capturarlos es invasión del espacio sagrado. ‒ Si los mapuches le gritan asesinos a los gendarmes, amenazándolos con que los van a ir a buscar adónde vayan, es manifestación de telurismo. Si los gendarmes le dan la voz de alto a los depredadores es acoso verbal homicida. ‒ Si los mapuches van encapuchados, rompiendo todo a su paso, es costumbrismo añejo y sacro. Si los gendarmes llevan el casco reglamentario, se están ocultando y encubriéndose corporativamente. ‒ Si los mapuches atacan en malón, en organizadas guerrillas, viven en la clandestinidad y prometen matar a sus enemigos, es el reclamo sempiterno de las raíces contra los malvados huincas. Si los gendarmes detienen a los guerrilleros, sorprendidos in fraganti, es Terrorismo de Estado. ‒ Si los mapuches reclaman millones de hectáreas del territorio patrio, es el derecho originario. Si las fuerzas de seguridad les piden ‒y ¡por favor!‒ que dejen de saquear el microcentro, volvió “la dictadura”. ‒ Si se ocultan, evanescen, se volatilizan, se esfuman los integrantes de RAM, tras cometer todo tipo de tropelías, es táctica de intransigencia en pos de reclamos milenarios. Si todo el planeta político, jurídico, legal y militar se moviliza para encontrar a un anarquista filomapuche, es un caso evidente de desaparición forzada. ‒ Si mueren en cumplimiento de sus misiones contingentes enteros de gendarmes, a nadie se le ocurre pensar que detrás de cada uno de ellos hay una familia que los llora. Si le tocan una rastra a un nómade por propia decisión, Maldonado es mi hermano, mi hijo, mi nieto, mi chozno. ‒ Si The Benetton Group, nos roba la Patagonia, es capitalismo salvaje y penetración foránea; y es cierto. Si lo mismo hace The Mapuche Nation con sede en la británica Lodge Street, también lo es. Pero de eso no se habla. - Y mucho menos de las explícitas, antiguas y remozadas pretensiones israelitas a nuestra soberanía patagónica. Esto ya es conspiracionismo nacionalista. Que nadie ose traspasar el umbral de lo políticamente correcto. ‒ Si el imbécil del rabino Bergman, investido de Ministro Planta y de Funcionario Plasma, les devolvió oficialmente a los mapuches, el 30 de diciembre de 2016, el bastón de mando que en 1938 Perón les había obsequiado, “como reconocimiento de los derechos ancestrales del pueblo mapuche”, según lo glosa, larga y admirativamente la revista kirchnerista Zoom, embanderada ahora con la causa Maldonado, entonces quiere decir que tanto el macrismo como el peronismo no están dispuestos a defender a la patria de la demencia criminal de estas tribus sediciosas, delictivas e insurrectas.Son partes intercambianles del mismo Régimen. Conviene tomar nota y obrar en consecuencia, esto no lo arreglan ni lo entienden los brujos de la tribu, sean liberales o marxistas, sino los Defensores de la Argentinidad.

La voluntad en el presente siglo

El siglo XX pasado estuvo lleno de vicisitudes y guerras. La voluntad y la reflexión constituyeron columnas vertebrales en las generaciones que las superaron y sobrevivieron y en la actualidad muchas de las desgracias que sufre la humanidad se tratan de solucionar con otras armas que no parecen dar un resultado favorecedor al hombre. La problemática social actual: adicciones, embarazos no deseados, madres solteras, divorcio, abandono, abuso físico, emocional, psicológico, sexual, deserción escolar, bullying, violencia, persisten en una generación que no encuentra el modo de librarse de ellas con los instrumentos que ofrece la cultura de hoy: interés individualista, mínimo esfuerzo, cero compromiso, salida fácil y cero renuncia al yo. Una cultura que premia el camino fácil etiquetándolo de astucia, que identifica el seguir los instintos con la libertad, que acusa el uso del razonamiento de represión, que proclama el reinado de los sentimientos a flor de piel y tacha a la reflexión de cobardía, advirtiendo de cualquier compromiso como esclavizante y presentando la renuncia como fracaso. Cultura que ha engendrado una generación de la espontaneidad, donde cualquier reflexión en la toma de decisiones es lastre para la felicidad. Estos elementos que la cultura "moderna" ofrece al hombre para enfrentar estos problemas se basan en un libertinaje y autonomía ilimitados, que pueden sonar muy atractivos, pero que en la práctica no le dan la capacidad de superar las dificultades personales que la vida le arroja. Y esta generación ¿Podrá encontrar la solución en los prodigios de sus manos, como la tecnología? ¿O necesita mirar atrás y aprender de aquellas generaciones de sobrevivientes de hace décadas? ¿Que tenían esas personas del siglo pasado que admiramos por sus logros y avances? La respuesta puede estar más cerca de lo que nos imaginamos y más lejos de lo que necesitamos. En muchas de estas complicadas problemáticas sociales modernas se percibe un fondo de dejadez, es como si hubiéramos dejado de caminar por años y ahora quisiéramos correr del león que nos ataca. No podremos escapar porque los músculos que necesitamos para alejarse del peligro no responden, estos músculos atrofiados podrían ser la voluntad y la reflexión. Sí, LA VOLUNTAD!! Esa vieja pincelada humana que, junto con la racionalidad, la libertad, la capacidad de amar y de hacer cultura, nos diferencia de los animales. "La voluntad (del latín voluntas) es la potestad de dirigir el accionar propio. Se trata de una propiedad de la personalidad que apela a una especie de fuerza para desarrollar una acción de acuerdo a un resultado esperado. La voluntad implica generalmente la esperanza de una recompensa futura, ya que la persona se esfuerza para reaccionar ante una tendencia actual en pos de un beneficio ulterior. La voluntad ha motivado todo tipo de debates filosóficos ya que está vinculada a lo que se desea realizar y al entendimiento de las razones por las cuales un sujeto escoge hacer eso. Por lo tanto, la voluntad tiene relación con el libre albedrío". Es una fuerza que nos puede llevar a muchos lados, pero que siempre nos impulsa a tratar de alcanzar aquello que consideramos un bien, o un beneficio para nosotros. De ahí que la voluntad debe estar regida y dirigida por la razón y la reflexión para que nos lleve hacia un bien verdadero. La voluntad puede ser un elemento decisivo ante los embates del mundo moderno que nos empuja a tomar decisiones precipitadas y basadas en el sentimiento del momento, o que nos arrincona a buscar salidas escabrosas cuando estamos sumergidos en problemas que nos sobrepasan. Por eso es importante desarrollarla junto con la reflexión, en cualquier etapa de la vida, pero con más razón desde los primeros años de vida, cuando somos niños y jóvenes. Todos necesitamos voluntad: • Voluntad para resistir lo que propone cultura materialista e individualista. • Voluntad para tomar decisiones de vida que nos protegen de una problemática futura. • Voluntad que nos lleva a someter los instintos y los sentimientos a la razón. • Voluntad para no ceder a la presión social de la cultura utilitarista y sexualizada imperante. La voluntad puede constituir la mejor "vacuna" para prevenir las problemáticas sociales que nos aquejan hoy, e inclusive para prevenir los dolores "emocionales" que sufren muchos de los corazones.