Al 24 de marzo de 1976 - ¡Acto genial, que recuperó a la Patria y sus glorias que la perversa ideología antinacional, pretendió borrar su historia.
Ya cansada de soportar, infames desplantes desde los 60, ejerciendo su potestad de optar, escucha al pueblo que el poder detenta.
Se empeñó consciente con la afrenta, que jóvenes idealistas irracionalmente sustentaron.
La policía intentó, a modo de dar cuenta, siendo sobrepasada, el mal aumenta.
Sangrientos desplantes hasta los 70, llega el límite que el estoico pueblo soporta.
El Gobierno de la Nación cierra cuenta, imponiendo a las FFAA la misión que importa.
Políticos todos, sin condición ni objeción, asienten necesaria la acción militar.
Así salvaron el deteriorado Gobierno de la Nación, que continúa en severos desaciertos desatando malestar mayor.
El 24 de marzo es aclamado, por respuesta a feroz agresión salvando la democracia y la libertad del país. El peligro amainó, gracias a las Fuerzas en acción.
Nunca fue causa de represión, sino triste consecuencia de extraña ideología, que políticos a dedo, con artera metodología dieron espacio a solapada traición.
El Soldado Argentino hasta su vida entregó, por caprichoso desvío de aprendices mal nacidos.
Pretendieron cambiar la Bandera que Belgrano nos legó y en patrios sentimientos no fueron admitidos.
Pusieron la Nación en peligro de secesión; desconociendo nuestra historia y el costoso sacrificio de nuestros héroes. Quienes, a sable y lanza, nos dieron el testimonio de su bravura, con singular beneficio.
Querido Soldado, soslaya el maltrato, tu entrega sin límites al sagrado juramento, será causa de tu gloria y el fin del relato. Tu nombre, se inscribirá en el Bronce Eterno del Patrio Monumento.
Aún en la cárcel, purgando culpas nunca habidas, el 24 de marzo, será símbolo de grandeza merecida. Vívelo con plenitud, como blasón inconfundible de noble entrega, mandato de sangre criolla que hierve, cuando tocan lo querido
¡VIVA LA PATRIA!!! y el 24 de marzo de 1976!!! sostén de la democracia actual!!!
La salvaje juventud idealista, con artera mala intención, uso el símbolo de esta fecha, para desgastar y anular su patriótica acción que fue la de ¡recuperar la Nación!
Nada tuvo que ver con el comienzo de la represión. La agresión por ellos iniciada data de más de una década antes de este patrio acontecimiento
Con la maldita trilogía instalada en el inconsciente popular, repitan hasta el hartazgo ¡Memoria, Verdad y Justicia!
Pero, destrozaron la historia para borrar sus sangrientos actos. Modificaron la justicia para encarcelar a los vencedores y crearon falsos Tribunales para justificar devastadora impunidad
¡Memoria sin historia es falaz relato!
¡Verdad sin historia es cruel mentira!
¡Justicia sin verdad histórica es injurioso prevaricato!
Se empeñó consciente con la afrenta, que jóvenes idealistas irracionalmente sustentaron.
La policía intentó, a modo de dar cuenta, siendo sobrepasada, el mal aumenta.
Sangrientos desplantes hasta los 70, llega el límite que el estoico pueblo soporta.
El Gobierno de la Nación cierra cuenta, imponiendo a las FFAA la misión que importa.
Políticos todos, sin condición ni objeción, asienten necesaria la acción militar.
Así salvaron el deteriorado Gobierno de la Nación, que continúa en severos desaciertos desatando malestar mayor.
El 24 de marzo es aclamado, por respuesta a feroz agresión salvando la democracia y la libertad del país. El peligro amainó, gracias a las Fuerzas en acción.
Nunca fue causa de represión, sino triste consecuencia de extraña ideología, que políticos a dedo, con artera metodología dieron espacio a solapada traición.
El Soldado Argentino hasta su vida entregó, por caprichoso desvío de aprendices mal nacidos.
Pretendieron cambiar la Bandera que Belgrano nos legó y en patrios sentimientos no fueron admitidos.
Pusieron la Nación en peligro de secesión; desconociendo nuestra historia y el costoso sacrificio de nuestros héroes. Quienes, a sable y lanza, nos dieron el testimonio de su bravura, con singular beneficio.
Querido Soldado, soslaya el maltrato, tu entrega sin límites al sagrado juramento, será causa de tu gloria y el fin del relato. Tu nombre, se inscribirá en el Bronce Eterno del Patrio Monumento.
Aún en la cárcel, purgando culpas nunca habidas, el 24 de marzo, será símbolo de grandeza merecida. Vívelo con plenitud, como blasón inconfundible de noble entrega, mandato de sangre criolla que hierve, cuando tocan lo querido
¡VIVA LA PATRIA!!! y el 24 de marzo de 1976!!! sostén de la democracia actual!!!
Nada tuvo que ver con el comienzo de la represión. La agresión por ellos iniciada data de más de una década antes de este patrio acontecimiento
Con la maldita trilogía instalada en el inconsciente popular, repitan hasta el hartazgo ¡Memoria, Verdad y Justicia!
Pero, destrozaron la historia para borrar sus sangrientos actos. Modificaron la justicia para encarcelar a los vencedores y crearon falsos Tribunales para justificar devastadora impunidad
¡Memoria sin historia es falaz relato!
¡Verdad sin historia es cruel mentira!
¡Justicia sin verdad histórica es injurioso prevaricato!
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* Transcribimos una nota realizada el 06 de mayo de 2021 a Monseñor Héctor Aguer en la cual pidió "memoria de verdad y justicia para todos"
El arzobispo emérito de La Plata, monseñor Héctor Aguer, reflexionó sobre la memoria, “un elemento fundamental para configurar la identidad de un país”. Al respecto, señaló que hoy “se habla frecuentemente de la memoria, tenemos un Día de la Memoria, pero tengo la impresión de que muchas veces esa memoria es, digamos, tuerta o hemipléjica, porque mira con un solo ojo y por tanto no es ecuánime”.
En ese sentido, advirtió: “No se puede utilizar la memoria como un recurso para sostener el encono, el odio, porque eso no es sano, eso hace daño a la sociedad y eso es lo que nos está ocurriendo muchas veces”
Ya murieron 600 militares presos pero sin condena; “Cuando se plantea si hay presos políticos en la Argentina rápidamente se dice que no los hay y creo que sí hay presos políticos. Los presos políticos son esos militares que se encuentran en la cárcel sin condena, con largas prisiones preventivas, acusados de delitos de lesa humanidad. Y digo acusados, pero no están condenados y mueren en la cárcel. He leído, días pasados, que han muerto más de 600 militares presos y sin condena. Hay personas que son ancianos, están enfermos, pero no se les concede la prisión domiciliaria cuando a un político corrupto, joven, condenado en todas las instancias, lo han dejado ir a vivir a su casa. Ahí cumple la condena y una condena que es pequeña, sin embargo esas otras personas no están condenados pero están presos y están condenados a morir, a morir en la cárcel y no humanamente”.
Monseñor Aguer recordó que el obispo castrense “lo ha dicho varias veces y lo ha dicho muy bien, advirtiendo que no podemos nosotros permitir una cosa así. Esos delitos son injustificables ciertamente pero ¿ dónde está la Justicia? ¿ dónde están las condenas? Ellos no han sido condenados”. Esto, aclaró, “no quiere decir que yo justifique lo que ha sido la represión de los gobiernos militares, de ninguna manera. Pero también pensemos que todo eso comenzó no el 24 de marzo de 1976, sino que comenzó en el tercer periodo presidencial del General Perón, que mandó aniquilar a la subversión”
El prelado subrayó que espera que “no se malinterpreten mis palabras, no estoy justificando esos delitos de ninguna manera porque los militares recurrieron a formas inhumanas y anticristianas para combatir a la subversión pero juzguemos eso con objetividad y por qué si no están condenados están muriéndose en la cárcel”.
Por último, ratificó que “si estamos en una democracia verdadera, la justicia tiene que ser objetiva, hay que mirar con los dos ojos y no debe prestarse para ser usada por el encono, por la venganza, por el rencor. Con rencor no hay futuro, con el rencor no hay democracia verdadera. Con el odio el país se disuelve”, concluyó, animando a poner esto en la balanza para poder crear opinión al respecto, para que la justicia sea "igual para todos"
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