viernes, 19 de abril de 2013

18A en la Plaza Independencia de S M de Tucumán

Yo estuve en la Plaza Independencia y aunque hay muchas cosas para decir sólo haré un breve comentario de lo que ocurrió anoche en Tucumán: Fue un acto multitudinario, término que no se usa hoy en las crónicas de medios locales, convocado por tucumanos disconformes con los gobiernos nacional y provincial. Fue la gente harta de la inflación; de la inseguridad; de la corrupción, de los Néstor, los Báez, los Cristóbal López, los Jaime, los Shocklender; de la falta de Justicia; de los intentos de hacer desaparecer la libertad de prensa; del avasallamiento al Poder Judicial; de la supresión de las medidas cautelares que permiten al ciudadano defenderse de los gobiernos; de los jubilados que no cobran lo que ordenó la Suprema Corte; de los intentos de modificar la Constitución con leyes inconstitucionales; de los gobiernos que sólo hacen cordón cuneta y algo de pavimento; de la falta de libertad para circular por el país o viajar al exterior; de la deplorable educación en la escuelas del Estado; de la imposibilidad de comprar lo que se nos de la gana; del señor Moreno; de la dictadura plebiscitaria como las de Hitler o Mussolini; de la falta de conferencias de prensa de la presidente y del gobernador, de la compra de aviones millonarios en dólares, para que estén al servicio de Alperovich y su familia, etcétera, etcétera… No fue convocado por los partidos políticos opositores, como se quiere hacer creer, ni por un ignoto señor, como se dijo en un principio en algún medio. Fue la ciudadanía. La gente común. He visto muchos niños, mujeres, personas en sillas de ruedas. Los partidos sólo se adhirieron y acompañaron a los ciudadanos indignados. Durante unos 50 años concurrí, como periodista, a todos los actos organizados en la Plaza Independencia. Primero como cronista, después como jerárquico para controlar que los cronistas no escribiesen con el corazón, y puedo decir que la protesta de ayer fue comparable a las más numerosas de partidos políticos. Con la diferencia de que esta vez no hubo micros llevando empleados públicos o beneficiarios de subsidios a los que se amenazaba con castigarlos si no concurrían: no hubo choripanes, ni unos pesos, ni tetrta brick,. ni se pasaba lista. Los miles de personas llegaron por sus propios medios. Por que querían protestar. No quiero aventurar número de asistentes por que es muy difícil de calcular. Dar las cifras de la policía es decir lo que el gobierno quiere hacer creer. Es como afirmar que la inflación es la que da el Indec. Con la palabra multitudinaria, que los medios locales evitaron usar, es suficiente. Fueron muchos, muchísimos, los que fueron a protestar. Y para cerrar quiero decir que así como la ciudadanía opositora se unió hace falta que los partidos se unan. Si el principal opositor sólo tiene el 17%, como en las últimas presidenciales, con seguridad que todo seguirá como está. El país derrumbándose y los argentinos perdiendo su calidad de vida. H Garcia Hamilton

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