lunes, 25 de julio de 2022

Salarios V

Los militares argentinos son los peores pagos de la región!!
Toda la familia militar espera ilusionada que el ministro de Defensa Jorge Taiana cumpla la promesa que hizo hace más de dos meses de equiparar los salarios militares con los de las Fuerzas de Seguridad, porque los ingresos castrenses argentinos respecto de los países que limitan con Argentina son los más bajos de la región.

Comparar lo que cobra un Segundo Teniente del Ejército de EEUU sería injusto; ese gobierno es uno de los que destina mayor PBI a su instrumento militar (alrededor de 4 puntos) en el mundo; contra el nuestro que destina diez veces menos, por debajo de un punto del PBI argentino. Las realidades económicas financieras y del día a día también son demasiado abismales, por eso se elige acotar el muestreo a la situación en los Estados vecinos que, si bien tampoco atraviesan por la misma crisis que nosotros, son los más semejantes, de esta manera, logramos evitar el mal momento de comentar que el primer rango de oficial estadounidense percibe U$D 3.500 mensuales de haber básico.

La mayoría de los países tienen un solo tipo de cambio y no padecen la realidad de tener que cotizar en infinidad de tipos de cambio, como ocurre aquí donde hablamos hasta del “dólar Netflix”, por esto, es necesario aclarar que el cálculo de cada caso se hará en base al valor de cambio al que tiene acceso cada militar relevado. Como parámetro, se considerará siempre el primer grado de oficiales de las Fuerzas Armadas y su conversión a dólares

"Ranking salarial"
- En la situación de los argentinos, a $330 por cada dólar (que es el valor al momento de redactar); el haber básico de un Subteniente, Alférez o Guardiamarina argentino (según el aumento de julio y que cobrarán en agosto de 2022): es de U$S 272 dólares, “es el más bajo entre todos los uniformados extranjeros consultados (y quedaría en el mismo puesto si el cálculo fuera considerando el valor oficial del dólar)”

- El primer lugar, de haberes básicos lo encabeza Brasil, donde un Segundo Teniente percibe 7.000 reales, los que significan U$S 1272 dólares (relación: 5.5/1)

- El segundo lugar, Chile, donde en el mismo grado reciben U$S 1250 dólares (1.250.000 de pesos chilenos)

- El tercer lugar, Uruguay, un Alférez del cuerpo comando cobra U$D 1.116 (47.947 pesos uruguayos con un dólar a 42,95)

- El cuarto lugar, Bolivia, con un haber básico de U$S 880, es decir 6.093 pesos bolivianos.

- El quinto lugar, Paraguay, con un recibo mensual de U$S 780 que es lo que valen los 5.300.000 de guaraníes paraguayos que perciben por sus servicios

Según las cifras expuestas (y los diversos comentarios oficiales, embajadores y agregados de defensa de los países citados), no solamente se concluye que los efectivos de la Armada Argentina, del Ejército Argentino y de la Fuerza Aérea están en la peor situación salarial de la región, sino que incluso están 2.8 veces por debajo del promedio y U$S 1000 en detrimento que un Segundo Teniente brasileño, el mejor pago en el mismo espectro consultado.

A la hora de hablar del pago salarial a militares es importante destacar que no se trata de un factor más en el gasto público, “es en realidad una inversión volcada a hombres y mujeres que, por esa profesión elegida, son de los pocos a los que se les exige dedicación exclusiva a esa labor y pueden ser requeridos en cualquier momento del año y por tiempo indeterminado si una amenaza regular externa o situación de catástrofe natural lo requiere, sin ningún resarcimiento extra que amerite un análisis aparte”.
En esto último puede verse como pequeño ejemplo la labor de las Fuerzas Armadas argentinas desde la hora cero de la “pandemia de coronavirus”, cuando aún no se sabía el impacto en el organismo de ese virus, ni mucho menos se veía una cura.

En la misma línea que el párrafo precedente, no es menor poner en foco el malestar existente entre los uniformados hacia las autoridades militares y políticas que dejaron rezagada la discusión de haberes a promesas aún inconclusas (“¿Llegará el milagro de equiparación en la cena de camaradería?”, se preguntan), mientras la inflación acelerada licua el falso aumento del 60% (prorrateado hasta marzo 2023) y ven abrir una nueva unidad militar (en Catamarca), mientras el resto de la estructura está ya esquelética y sin los recursos suficientes para un funcionamiento normal y cotidiano de alistamiento y adiestramiento acorde a los desafíos del Siglo XXI.

Hoy, pese a la activa participación cotidiana, la mayoría de quienes juran ofrendar sus vidas por sus compatriotas si fuese necesario, están por debajo de la línea de pobreza en Argentina.

Fuente: Bryan J. Mayer - ellitoral.com – tiempomilitar.com.ar




1 comentario:

  1. Las Fuerzas Armadas son el último recurso para la supervivencia del Estado (fijarse en Ucrania); sin embargo, la política que se viene llevando para con ellas, parecería que tuviera como finalidad degradarlas, eliminarlas. Sus integrantes, al carecer de adecuados medios de entrenamiento y bajísima remuneración en relación a sus capacidades intelectuales, físicas y psicológicas mudan, no sin dolor, de carrera, en busca de mejores oportunidades.
    Urge tomar medidas para que se reafirme la especificidad de la función militar y se devuelva a sus integrantes, el orgullo de pertenecer. Es imprescindible mejorar las muy bajas retribuciones en relación con las de otros funcionarios civiles, incluidas las Fuerzas de Seguridad, cuyos salarios aumentaron mucho más que la del militar, en quién la sujeción profesional es mayor; sus leyes particulares la constriñen. Solo tres empleos del Estado requieren aprobación del Senado, los Oficiales Superiores, los Jueces y los Embajadores, esto significa que se encuentran en el mismo nivel, la misma categoría, no obstante ello, las diferencias salariales de los últimos con los primeros, son abismales; deberían equipararse!! de Jorge Augusto Cardoso

    ResponderEliminar